También conocida como anafrodisia, este fenómeno se da cuando la persona se abstiene de tener sexo o cualquier otra actividad sexual, pierde plenamente el deseo de descubrir esa necesidad biológica, que para muchos es importante.

Especialistas en sexualidad coinciden en que este es un problema psicológico que afecta directamente a aquellos que rechazan cualquiera de las experiencias sexuales. Independientemente de la pareja, este es un hecho que el individuo decide no tener contacto íntimo.

El doctor Patrick Carnes, en su libro Anorexia sexual: superar el odio sexual a sí mismo, menciona que las personas que padecen de ese trastorno ven el sexo como un enemigo silencioso. “Se consumen por el terror al placer sexual. Se sienten profundamente incómodos con una cultura que promueve incansablemente el sexo pero que es extrañamente inconsciente. Sufren silenciosamente”, recalca el experto en sexualidad.

Por su parte, el psiquiatra Walter Ghedin expresa que la abstinencia del deseo sexual es como “la falta de libido o ‘apetito’, acompañada de una preocupación excesiva para no tener sexo y alteraciones en la imagen corporal, según el medio Infobae.

¿Qué provoca la anafrodisia?

- La falta de educación sexual

- Uso excesivo al consumo de pornografía

- Bajo autoestima, o exigencias físicas hacia las otras personas

- Abusos sexuales o agresiones, sobre todo si ocurrieron en la infancia

- Alto nivel de estrés

- Miedo de hablar sobre temas sexuales

- Temor por las enfermedades de transmisión sexual

Pero como todo tiene cura, a excepción de ciertas cosas, este es un problema que se puede combatir. Si eres de las personas que a veces no siente la atracción por tener deseos sexuales o ya es algo permanente en ti, lo más recomendable es acudir con un experto en la materia.