Esta pareja puertorriqueña soñaba, igual que muchos, en su gran día de boda. Pero mientras hay quienes anhelan usar el vestido blanco el día que den el ‘sí, quiero’; ellos aspiraban a algo menos tradicional y un poco más oscuro.

No eligieron un hotel, ni una iglesia, sino un cementerio. En el interior de este camposanto, los nuevos esposos celebraron su unión con sus seres queridos. La ceremonia tuvo lugar junto a la lápida del papá y del hijo de la novia, ya fallecidos.

La novia, Sheyla Camuy, asistió vestida de negro, en un carro fúnebre; un ataúd simulaba el tradicional altar. El evento, narra el medio Primera Hora, estuvo inspirado en la película The Nightmare Before Christmas de Tim Burton. Las invitaciones incluían un pequeño ataúd como detalle para lo invitados.

Camuy incluso dio declaraciones. “Primero pensamos en cancelar por respeto, pero tenemos que continuar y como ustedes dicen ‘Puerto Rico se levanta’. Yo soy fiel creyente de eso. Pues aquí estamos demostrando que no nos vamos a parar, así que seguimos”, dijo haciendo referencia al huracán que azotó recientemente a la isla.

El novio explicó que fue ella la que eligió el lugar y que él no lo encontraba extraño. Agregó que en la actualidad muchas personas se casan en lugares que antes no eran considerados normales, como la playa o paracaídas. Lo que le importaba, dijo, era es hacer feliz a su nueva esposa y por eso accedió.