Buena Vida
¡Adultos mayores consumen más marihuana que antes!
La actitud tolerante que tiene este grupo de personas hacia el cannabis no debe sorprender mucho, ya que esos abuelos son la misma generación que acampó en Woodstock o vivió la revolución sexual.

Referencial. Los adultos de 50 años o más representan el 16,9% de usuarios que usan la marihuana con fines no médicos.
Bingo, golf y marihuana es el plan perfecto para muchos ancianos estadounidenses que cada vez añaden cannabis a su rutina. Según Playground, estudios recientes señalan que las personas mayores de 65 años conforman el grupo con mayor consumo de marihuana en los últimos años.
De 2006 al 2013, la prevalencia de su uso entre mayores de 50 años aumentó un 71,14%.
En el mismo período, el consumo de la hierba creció el 15,3% anualmente, esto según el portal de Medicina geriátrica y gerontológica.
Pero la actitud tolerante que tiene este grupo de personas hacia el cannabis no debe sorprender mucho, ya que esos abuelos son la misma generación que acampó en Woodstock o vivió la revolución sexual.
Actualmente, algunos acuden a esta droga como alternativa a sus medicamentos recetados, ya sea para calmar sus dolores o mejorar problemas de sueño.
Adele Frascella, una adulta mayor comentó que, “la consumía cuando era veinteañera, pero la dejó luego de casarse y tener a su bebé, no obstante, la echaba de menos, pero luego ya adulta, más relajada y con más tiempo, volvió a usarla cuando se dio cuenta de que muchos de su edad la consumía”.
Ancianos de California viajan en grupo a tiendas locales de marihuana, donde compran todo tipo de productos, desde infusiones, gotas y barritas.
Los dispensarios legales han visto la oportunidad en un grupo en crecimiento.
Para el 2050, la población de 65 años o más, habrá llegado a 83,7 millones de personas en Estados Unidos.
Según Kandice Hawes-López, directora de alcance comunitario de Bud and Bloom, ellos llevan a los ancianos de la localidad Laguna Wood a sus dispensarios, donde les dan almuerzo, orientación educativa y la oportunidad de interactuar con las compañías proveedoras de cannabis para luego permitirles ingresar al dispensario donde hacen un recorrido y si lo desean pueden hacer compras. Desde hace 18 meses esa entidad viene dando con éxito ese servicio.
“Cada vez acuden entre 20 y 50 adultos con edades de 55 a 90 años que llegan a ese lugar para aprender a usar el cannabis, sobre todo, para reemplazar sus medicamentos actuales, aunque hay otros adultos mayores que la usan de forma recreativa”, comentó la funcionaria.
La tendencia hacia la regulación del cannabis en Estados Unidos ha significado un cambio importante respecto a la política de mano dura de décadas pasadas.
Hasta 9 estados, como California, permiten el uso de la marihuana con fines recreativos, mientras que otros 30 lo aprueban siempre y cuando su fin sea únicamente medicinal.
Los adultos de 50 años o más representan el 16,9% de usuarios que usan la marihuana con fines no médicos.
A la luz de los datos los médicos empiezan a demandar investigaciones para comprender mejor sus efectos secundarios que el consumo de cannabis puede generar en las personas de la tercera edad.
Hawes-López cree que el estigma seguirá disminuyendo y que verá más personas dispuestas a considerarlas como una posibilidad para ellos y otros miembros de su familia que lo usen solo como medicina.
“Creo que la aceptación de las personas que consumen marihuana de manera recreativa también va a aumentar”, aseguró la directora del alcance comunitario.