Este hombre se cortó la nariz y orejas para transformarse en una calavera viviente

Tras la muerte de su madre, Eric Yeiner Hincapié Ramírez emprendió una transformación física y desde entonces jamás pasa desapercibido. Se cortó la nariz y las orejas para convertirse en lo que siempre quiso ser: una calavera viviente.

Según ha contado a medios nacionales e internacionales este hombre de 22 años, que habita en Cartago, se trata de un deseo que lo había acompañado desde su infancia. Sin embargo, no se realizó las modificaciones corporales antes para no causar molestias a su progenitora.

Y es en ese municipio colombiano donde actualmente se dedica a modificar también el cuerpo de otros: es tatuador y el mismo lleva tinta sobre la piel, que como en el caso del popular modelo Zombie Boy, fallecido a inicios de agosto, simula las características de un esqueleto.

“Soy una persona normal pero tengo un aspecto diferente a los demás. Una forma de pensar, de vestir, un estilo de música diferente. Así como estoy me siento bien”, dijo Hincapié en una entrevista que cita RCN Radio.

El proceso

Primero el colombiano se tatuó grandes círculos negros alrededor y dentro de los ojos; así como una dentadura que cubre gran parte de su rostro. Luego, le tocó el turno a su lengua, nariz y orejas.

A la primera decidió dividirla en dos partes, como si de la de un reptil se tratara, mientras que mutiló la mitad de su nariz y los lóbulos de sus orejas.

Al parecer la aspiración de Hincapié es continuar modificando su imagen. En una publicación en su cuenta de Instagram señala: “Poco a poco, la meta sigue para poder estar más conectado con mi mayor anhelo: las calaveras”.