La lluvia no detuvo a Carlos Vives

Carlos Vives deleitó a los miles de fanáticos la noche del viernes 2 de febrero en el estadio Alberto Spencer de Guayaquil, donde realizó un concierto. La intensa lluvia que caía sobre la ciudad, no fue obstáculo para que llenara el recinto.

“Mojados, pero contentos. Este es un concierto de camisetas ensopadas”, comentó Vives, quien también recibió bastante agua mientras realizaba su espectáculo.

“Lo amo, no me importa si llueve, truena o relampaguee, yo a vives no me lo pierdo por nada del mundo”; dijo Tania Guashima, quien llegó con su compañera de trabajo Varidia Vaca.

El evento comenzó a las 21:30 con el telonero, Gianpiero, un joven cantante porteño de la escuela de Borki’s, quien se ganó aplausos con el tema Serena, el cual afirmó lo va internacionalizar.

A las 21:50, Carlos Vives saltó a escena. Para ese momento el público ya estaba mojado hasta los huesos, pero tan pronto empezó a sonar, “Ahí llego yo”; la gente se le olvidó el frío, se subió a las sillas y enloqueció.

“Te amo, Carlos, cásate conmigo”, gritaba Tania, mientras que Varidia, aplaudía a mas no poder.

“Gracias mi Guayaquil, aquí me siento como en casa”, dijo el artista, quien demostró que pese a sus libras de mas y sus 56 años, sigue con la misma energía de siempre y con su talento y voz intactos.

El colombiano hizo un recorrido por sus mejores temas, e incluso complació a Oscar, un fanático que le pidió a través de un cartel, que le dedique el tema, “te conocí una mañana” a su novia Diana.

“Diana, esta melodía va para ti de parte de tu novio y ya dale el sí, de una vez”, dijo el cantante, en medio de una ovación de la multitud que hizo retumbar el estadio.

“Con lluvia y mojaditos igual se goza el vallenato”, dijo Vives.

Cerca de la media noche el cantante invitó a el escenario a Patricia González. El público, que desconocía de esta invitada de lujo, se quedó impávido.

Patricia subió, y se adueñó del escenario casi de inmediato. “Esto solo lo hago por Carlitos, él es el único al que nunca le digo no”, comentó. Y la González empezó a cantar la “Tierra del olvido” con su voz ronca y encantó a todos.

Vives se le unió y en concierto adquirió otro tinte. El público pedía mas y mas pero la invitada dejó el escenario y el colombiano siguió su repertorio.

Para entonces , el agua hasta los huesos ya no se sentía. Pese a que la lluvia se ensañó con mas fuerza, la gente seguía encendida.

Los paraguas, que en principio impedían la vista del escenario a los que estaban en las zonas box y vip se bajaron, la fría lluvia era lo de menos

Entre los temas que cantó estuvieron Déjame entrar, La foto de los dos, Bailar contigo, y todos sus temas populares.

Tras mas de hora y media de música, el colombiano se despidió dejando complacidos a sus fanáticos. “Nosotras lo volveríamos a ver una y otra vez” dijeron Tania y Varidia ,quienes salieron por los túneles del estadio con el agua hasta las rodillas.