Saludos, doña Esperancita, mi nombre es Felipe, tengo 36 años y soy de Durán. Llevo tres años separado de mi mujer. Tuve muchos inconvenientes con ella, se volvió vanidosa, mentirosa e infiel. La descubrí chateando con otro hombre. No soporté su engaño, así que cometí el error de levantarle la mano; fueron tantas cosas que me hizo, sentí que la confianza se había roto. A pesar de todo, la sigo amando. Mis hijos decidieron quedarse conmigo, actualmente viven conmigo… aunque también la extrañan, sufren mucho al igual que yo. Ella me dijo fríamente que tenía un romance con aquel hombre, que ya no quiere saber nada de mí. Pero yo creo más bien que se ha vuelto ‘loca’ porque nunca ve por los niños, no los visita, ni se preocupa en lo más mínimo por su bienestar. Prefiere estar con su amante que con sus hijos. Mi mamá y hermano me ayudan con la crianza de mis pequeños, ya que yo paso trabajando. Todos los días pido fuerzas a Dios, pero a veces siento que ya no puedo más. Necesito un consejo suyo, ayúdeme a soportar todo este dolor, me siento deprimido y derrotado. Creo que perdí mi tiempo estando con una mujer que no me quería. ¿Qué puedo hacer?

Respuesta:

No la sigas tratando como si aún fuera tuya, ella ya está con otro hombre. El primer paso para evitarte tanto sufrimiento es aceptar la realidad. Veo que esta situación te está ahogando en un vaso con agua. Si tienen tres años de separados, ya debías haberla olvidado. Al parecer te ha pagado muy mal, pero tampoco creo que por buenito lo haya hecho, en algo has de haber fallado. Ahora lo que te toca es hacer borrón y cuenta nueva. Sigue adelante con tu vida, recuerda que nada es para siempre. A esa mujer olvídala de una vez, sácala de tus pensamientos, puede que sea difícil pero no imposible. Si no se preocupa por sus hijos, tú tranquilo, en esta vida las malas acciones se pagan. Sé un buen padre y jamás hagas que tus niños odien a su madre. Ella se dará cuenta de su error tarde o temprano y reflexionará. No tomes venganza, solo lleva tu conciencia tranquila de que has cumplido como padre y hasta más que eso. Por nada del mundo te descuides de tu rol, sigue fortaleciéndote con la fe en Dios. No deberías estar solo, busca una compañera que te escuche, y pueda darte la atención que necesitas. Aún estás joven, así que bien puedes enamorarte de nuevo. Espero que todo mejore en tu vida y levanta ese ánimo. ¡He dicho!

Doña Esperancita no solo trata temas relacionados al amor, también de otra índole. Cuente su historia a donaesperancita@granasa.com.ec o puede enviar mensaje al WhatsApp 0990214407.