ESTRÉS Y MALOS HÁBITOS AL COMER=GASTRITIS

Cynthia Flores R. floresc@granasa.com.ec Gastritis. Apenas alguien dice esa palabra, llegan las recomendaciones. “Toma el agua de la papa rallada”, “come tripita mishqui”, “el agua de lechuga es lo mejor”, “prueba con el bicarbonato”, “la sábila es milagrosa”... Y no faltan quienes han puesto en práctica una o más de estas recomendaciones, ante el deseo desesperado de acabar con ese ardor y dolor insoportables. Claro, llegan también las advertencias: “Se te va a hacer úlcera y luego puede ser un cáncer”. No están del todo equivocados, pero no siempre este es el destino de la enfermedad. El doctor Eduardo Marriot, gastroenterólogo y coordinador general de Investigación del hospital Teodoro Maldonado Carbo, del IESS, dice que esto solo ocurre cuando se conjuga la existencia de la bacteria con los malos hábitos, por ejemplo el hecho de comer a deshoras, o beber y fumar mucho. Reconoce que también en este mal se han visto cambios. Antes afectaba más a los hombres, pero ahora las mujeres están casi a la par. ¿Por qué? Porque el estrés también influye en la gastritis y el sexo femenino tiene una fuerte participación en el mercado laboral, lo que genera situaciones estresantes. A la hora de enfrentar esta dolencia, que es curable, la única manera es acabando con su causa. Mientras tanto, para luchar contra ese fuego que nos quema, hay ciertos alimentos que deben consumirse para darnos un alivio. Xiomara Guerra, doctora en Nutrición que labora para el hospital de especialidades Guayaquil Abel Gilbert, cuenta que hay productos que ayudan a cicatrizar y que es importante agregarlos a la dieta diaria (ver recuadro).