Buena Vida
¡Los sacudones la agarraron cocinando!

Miguel Ángel González, Esmeraldas
El terremoto ‘sacudió’ los techos y paredes de las humildes casas que se levantan en Muisne, Esmeraldas. Aunque algunas corrieron suerte y apenas se movieron con el sismo, otras, en cambio, se desplomaron como palillos.
Así sucedió con el hogar de Daisy Lara, habitante del barrio Chino, donde la tragedia se palpaba en cada rincón. “Estaba cocinando cuando vinieron los dos primeros sacudones, que no fueron tan fuertes. El tercero sí estuvo terrible”, comentó la señora, que se dedica a la venta de comida.
A las 19:30 del sábado, Lara vio cómo su vivienda quedó en ruinas. Ayer, sus parientes recogían las pocas pertenencias que quedaban bajo el techo de cinc que se precipitó sobre la infraestructura.
La escena se repetía en numerosos puntos de la zona, donde muchos hombres, desesperados, eran los encargados de llevar sobre sus espaldas muebles de cocina, camas, colchones, sofás...