El 2025 se despedirá con un espectáculo celeste poco común: el último eclipse solar del año tendrá lugar el 21 de septiembre, según informó la NASA. Será un eclipse solar parcial, es decir, el Sol no se cubrirá por completo, sino que una parte de su disco quedará oculto por la Luna, generando un efecto de 'mordida' en el astro rey.

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Este fenómeno astronómico ocurrirá cuando la Luna pase entre la Tierra y el Sol, proyectando su sombra sobre nuestro planeta. En este caso, la magnitud del eclipse será de 0,855, lo que significa que hasta un 85,5 % del diámetro solar quedará cubierto para algunos observadores.

¿Dónde será visible este eclipse?

La visibilidad del eclipse estará limitada a ciertas zonas del hemisferio sur. Australia, la Antártida y grandes extensiones del océano Pacífico y Atlántico serán los principales lugares desde donde se podrá observar este evento, siempre y cuando las condiciones climáticas lo permitan.

En particular, en el extremo sur de Nueva Zelanda, incluyendo la isla Stewart, se podrá apreciar hasta un 80 % de cobertura solar en la mañana del 22 de septiembre, debido a la diferencia horaria. Desde la perspectiva geográfica, el eclipse se producirá en el nodo descendente de la órbita lunar, un punto en el que la Luna cruza el plano de la órbita terrestre de norte a sur.

¿Por qué ocurren estos eclipses?

Los eclipses solares se producen cuando la Luna se interpone entre el Sol y la Tierra, proyectando su sombra sobre la superficie terrestre. Si la alineación es perfecta, se da un eclipse total o anular; si es parcial, como en este caso, el eje de la sombra lunar no alcanza a tocar la Tierra completamente, por lo que solo una parte del Sol se ve oscurecida desde ciertas regiones.

Estos eventos no tienen implicaciones físicas sobre la Tierra o la salud humana (más allá del daño que puede causar observar el Sol directamente sin protección adecuada), pero sí son culturalmente significativos en muchas sociedades y una oportunidad valiosa para la divulgación científica y la observación astronómica.

Otros eclipses que restan en 2025

Antes del eclipse solar de septiembre, habrá un eclipse lunar penumbral los días 7 y 8 de septiembre de 2025. En este tipo de eclipse, la Luna atraviesa la penumbra de la Tierra, provocando un tenue oscurecimiento que puede pasar desapercibido para el ojo humano, pero que es detectable con instrumentos. Este fenómeno será visible en Europa, África, Asia y Australia.

¿Qué eclipses traerá el 2026?

El 2026 será aún más espectacular para los fanáticos del cielo: 17 de febrero de 2026: un eclipse solar anular podrá observarse desde la Antártida, mientras que en otras regiones como África, Sudamérica y vastas zonas oceánicas (Pacífico, Atlántico e Índico), se verá de manera parcial.

2 de agosto de 2026: se producirá un esperado eclipse solar total, visible en regiones como Groenlandia, Islandia, España, Rusia y una parte de Portugal. Este será uno de los eventos más impactantes del año, pues quienes estén en la franja de totalidad experimentarán varios minutos de oscuridad en pleno día. Además, Europa, África, América del Norte y múltiples zonas oceánicas también podrán ver el fenómeno de forma parcial.

Los eclipses, ya sean solares o lunares, son una muestra de la precisión cósmica que rige nuestro sistema solar. Aunque no todos se ven desde cada rincón del planeta, gracias a la tecnología y la cooperación entre agencias como la NASA y organismos astronómicos locales, millones de personas pueden seguirlos en vivo o aprender sobre ellos desde casa.

El 21 de septiembre de 2025 será una nueva oportunidad para levantar la vista —con gafas especiales, claro— y maravillarse con uno de los fenómenos más fascinantes de la astronomía.

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