Pero...¿por qué Trump da la espalda al Acuerdo de París?

El 1 de junio el presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, oficializó la decisión de retirarse del Acuerdo de París sobre cambio climático aprobado por 195 países en diciembre de 2015. El anuncio fue realizado personalmente por el mandatario desde los jardines de la Casa Blanca. Esta determinación, a pesar de que ha causado todo tipo de reacciones a escala global, no ha sido tan inesperada como parece. Durante meses el presidente de EE.UU. infundió el suspenso con respecto a este tema, incluso durante la campaña electoral dejó clara su posición ante ciertos temas de interés general, entre los que destacaba, el cambio climático.

Algunas de las razones que condujeron a E.E.U.U. fuera del Acuerdo

El presidente Trump ha negado repetidamente creer que el cambio climático es culpa del ser humano. En realidad se ha referido a esta teoría simplemente como “mal clima”, durante una entrevista para MamaGrizz Radio, en agosto de 2015. Pero, en 2012 el mandatario fue aún más lejos, cuando afirmó que el cambio climático es un invento insidioso organizado por “los chinos”, con la intención de volver a EE.UU. menos competitivo en materia de producción y avances tecnológicos. “No soy un gran creyente en la contribución del hombre al cambio climático”, dijo en una entrevista en marzo de 2016.

Otra de las razones por las que Estados Unidos decidió hacerse a un lado de esta iniciativa, según Trump, es de orden nacionalista. Es decir, preocuparse primero por su propia nación antes que por las demás. Retirarse del tratado ayudará a las industrias de petróleo y carbón del país del norte y a la generación de empleos. “Fui elegido para representar a los ciudadanos de Pittsburg, no de París”, afirmó Trump.

¿En qué consiste el Acuerdo de París?

El acuerdo sobre cambio climático fue adoptado por 195 países en diciembre de 2015 en París. La iniciativa trazaba un camino a seguir en cuanto a la toma de decisiones concretas para frenar con la emisión de gases de efecto invernadero y así lograr mantener el calentamiento global por debajo de los 2 grados centígrados a largo plazo.

Según indica el texto del Acuerdo de París 2015, dentro del marco de la Convención de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático, los países miembros deben cumplir con ciertas metas, las mismas que son planteadas en virtud de reducir la emisión de gas carbónico y en conductas comerciales menos agresivas con el medio ambiente. Con un intervalo de dos años, cada país debe emitir un informe detallando las acciones que tomaron y los resultados obtenidos. Todo esto, con el objetivo de detener el aumento de temperatura del planeta.

La decisión de Trump acarrea varias consecuencias

Así como se produjo un efecto dominó positivo que atrajo gradualmente a más de un centenar de naciones a formar parte del Acuerdo de París, del mismo modo, con la salida de EE.UU., país con la mayor producción de gas carbónico en el mundo, se teme un efecto dominó a la inversa, y que la decisión de Trump provoque la salida de otras naciones más pequeñas.

Por otro lado, existen temores en el sector comercial, puesto que los importadores y exportadores temen recibir represalias arancelarias o incluso restricciones por parte de los países que han mostrado descontento con la decisión de Trump. Como por ejemplo Emmanuel Macron, presidente de Francia, que se manifestó a través de su cuenta de twiter, al igual que la canciller alemán, Angela Merkel, quien aseguró que lamenta la decisión de Estados Unidos, pero “seguiremos trabajando para salvar nuestro planeta’”, dijo a la prensa alemana.

Todos los miembros pueden retirarse del Acuerdo de París si así lo desean

Todas las naciones adquieren una serie de compromisos y derechos al formar parte de esta iniciativa y entre los cuales cuentan con el derecho a retirarse cuando lo crean conveniente para sus intereses, pero es importante tener en cuenta que nadie puede retirarse antes de los tres años, por tanto, hasta el 2020 no se hará efectiva la salida de EE.UU., sin embargo, el presidente Trump ya está legislando en favor de la retirada de su país y si no pretende reelegirse, dejar las consecuencias para su sucesor.

¿Quién se beneficia por la salida de EE.UU.?

La decisión de Trump es una buena noticia para algunos, especialmente para todo aquel que se mostró crítico del convenio desde el principio. Entre los beneficiados y que en facto son quienes más apoyaron a Trump durante las elecciones en noviembre de 2016, está el sector petrolero y energético. El Acuerdo de París si bien no liquida a estas compañías, las limita y obliga a someterse a drásticos cambios en pro del medio ambiente. Del mismo modo, gran parte de las minas de carbón pequeñas alrededor del país, cuya producción se quema a en térmicas bocamina para generar energía eléctrica, corrían un riesgo inminente con el tratado.

“Al cumplir su promesa, el presidente está apoyando los valores irrenunciables de Estados Unidos, rescatando los empleos del carbón y promoviendo electricidad confiable y de bajo costo para los estadounidenses y el resto del mundo”, dijo en un comunicado, Robert Murray, presidente ejecutivo de la compañía Murray Energy.

Por su parte, Paul Bailey, presidente de la Coalición Estadounidense por una Energía de Carbón Limpia, señaló que los estándares establecidos bajo el gobierno de Barack Obama eran demasiado estrictos y habría llevado a más regulaciones, mayores precios de la energía y dependencia de fuentes de energía menos confiables.