Buena Vida
Se vistió de payaso para recibir a Arjona
Una fanática viajó desde Manta para ver a su ídolo. Desde la segunda fila disfruto del encuentro con un disfraz
Sofía Morán viajó por dos ciudades hasta llegar a Quito para el concierto de Ricardo Arjona.
“Tengo un marido permisivo y unos hijos tan fanáticos como yo”, expresó la noche del jueves mientras esperaba que su ídolo saltará al escenario.
La manabita, de 37 años, es asesora de imagen y gracias a su negocio propio se dio permiso para asistir al show. Su peculiar disfraz llamaba la atención de todos quienes se dieron cita en el coliseo Rumiñahui, el 26 de julio.
Una melena celeste y maquillaje de payaso hicieron juego con el nombre de la gira ‘Circo Soledad’ y nombre del último disco del compositor.
Su estrategia era clara: desde la segunda fila y con su particular atiendo planeaba cautivar al artista guatemalteco.
‘Ella’ uno de los primeros temas en escena causó revuelo entre los asistentes, especialmente en Mónica Flores y Olga Rojas.
Las dos amigas se conocieron hace años cuando trabajaban en un centro comercial. Su pasión por Arjona es tan grande que asistir a cada espectáculo es un ritual.
La indumentaria es distinta y según la ocasión y la noche del jueves una camisa blanca con la leyenda ‘Arjona te amo’ se lució en los graderíos del recinto recinto.
A su lado, Soraya Morales y Lorena Salas sostenía una pancarta muy atrevida. “Tú mi marido y amante de mi amiga”, señalaba el cartel hecho con letras fosforescentes.
Una hora antes del evento, las amigas se habían juntado para hacer la manualidad aunque no terminaban de ponerse de acuerdo “quién es la esposa y quién era la amante”.
Sin daños a terceros’ es una melodía que remueve los recuerdos de las amigas cuando en la universidad se pegaban los chupes con la música de Arjona.
En los alrededores
Los espectadores del evento estaban confundidos al ver a Sebas Alarcón. Su parecido con Arjona es impresionante, incluso se gana la vida imitándolo.
Sebas llegó algo tarde al concierto, ya que estaba cumpliendo con otro compromiso. En su recorrido por el coliseo, la gente lo paraba para tomarse una foto con él. Algunos lo confundieron con el propio.
“No es posible no oyes que esta cantando adentro”, comentó un joven a su novia, quien quedó cautivada con los encantos del imitador.
Sebas ya ha tenido la oportunidad de compartir con su ídolo en dos ocasiones. “Yo soy más simpático”, bromeó.