¿Qué hacer antes y después de practicar sexo oral?

En el sexo oral se estimulan los órganos genitales con la boca, los labios y la lengua. Hay diferentes variantes, pero las más populares son la felación y el cunnilingus.

El primero consiste en chupar o lamer el escroto y el pene hasta lograr la eyaculación del hombre. En el segundo, se estimulan los órganos genitales femeninos (labios de la vulva, el clítoris y la entrada de la vagina) con los labios y la lengua.

Ambas acciones suenan atractivas, sin embargo —además del consentimiento de la pareja— deben existir cuidados antes y después de practicarlas:

Antes:

- Evita el cepillado o el uso de hilo dental inmediatamente antes del oral con el fin de prevenir la formación de heridas en las encías u otra parte de la boca.

- Usa preservativos. La protección te ayudará a prevenir enfermedades que se transmitan por esta vía.

- Identifica posibles heridas en la boca y en el área de los genitales.

- Los hombres deben lavarse con abundante agua y jabón, y verificar la existencia de puntos, irritación, verrugas o secreción.

- Las mujeres deben lavar la vulva con jabones íntimos o neutros, evitar realizarse lavados que no sean por indicación médica. Además, verificar si existe la aparición de ardor, quemaduras, picazón, ampollas, flujo con color u olor.

Después:

- Por las características contagiosas que tiene el semen, los especialistas aconsejan no ingerirlo.

- Lavarse los dientes y utilizar antisépticos bucales (enjuague bucal) sin alcohol.

- Buena higiene genital, tanto el hombre y la mujer, con agentes de limpieza de PH neutro apropiado para zona íntima.

La importancia de cumplirlo

El médico y sexólogo Rodolfo Rodríguez explica que el sexo oral tiene riesgos “casi idénticos al anal o vaginal”, al existir “exposición de las mucosas, de la zona genital donde pueden transmitirse infecciones virales, bacterianas y de parásitos”.

Detalla que esto podría ocasionar infecciones urogenitales, como Virus del Papiloma Humano (VPH), herpes, clamidia, entre otras.

Pese a estos peligros, según Rodríguez, “casi nadie se protege oralmente”. Por ejemplo —menciona— si un hombre va a recibir sexo oral, casi ninguno utiliza condón.

Agrega que al haber secreciones en la boca, “puedes tener una llaga, sarro, gingivitis, que son puertas de entrada a la sangre... Entonces cuando el hombre y la mujer lubrica y secreta, ahí está la infección, virus, parásitos y las bacterias”.

Asimismo recuerda que la saliva contiene enzimas digestivas que degradan los alimentos.

“Esto en la zona genital del hombre o la mujer, puede traer infecciones bacterianas... La boca es donde hay más bacterias, entonces no queremos que eso entre en la uretra de la mujer o el hombre y pueda causar un posterior problema”, indica Rodríguez.

El sexólogo menciona que la monogamia también es una vía segura para practicar sexo oral. “Las parejas monógamas confían el uno en el otro y se han hecho exámenes previamente para estar seguros de practicarlo sin ningún problema”.