Buena Vida
La muerte de un conejo gigante aviva la polémica de United Airlines
El conejo estaba destinado a ser el más grande del mundo.
Anette Edwards posa con Darius, papá de Simón.
Se llamaba Simón y murió en la bodega de un avión por causas desconocidas. La aerolínea donde viajó el conejo es la polémica United Airlines. Y, según su dueña, Annette Edwards, el conejo había tenido un chequeo veterinario antes de viajar y se encontraba completamente sano. Lo sucedido se suma al resto de incidentes en las que se ha visto envuelta la aerolínea estadounidense.
Tras su muerte Annette explicó al medio inglés The Sun: “He enviado conejos alrededor del mundo durante mucho tiempo y nunca sucedió nada. Ha ocurrido algo muy extraño y quiero saber qué”. La propietaria y ex conejita Playboy, se dedica a criar conejos gigantes para después venderlos como el caso de Simón.
El animal medía 90 centímetros y solo tenía 10 meses. Estaba por superar a su padre -Darius, de 132 centímetros y también propiedad de Edwards- y convertirse en el conejo más grande el mundo. Su dueña lo enviaba de Londres a Estados Unidos -el mismo vuelo donde un médico fue arrastrado violentamente de un avión de la compañía- para entregárselo a su dueño, supuestamente una celebridad cuya identidad no ha sido revelada.
La especie es muy valorada, a pesar de su tamaño, como animal de compañía por su carácter y su inteligencia y un comportamiento que es considerado más propio de un perro que de un conejo.
En un comunicado enviado a la BBC, United declaró: “Nos entristece escuchar esta noticia. La seguridad y bienestar de todos los animales que viajan con nosotros es de suma importancia para United Airlines y nuestro equipo PetSafe (el sistema de transporte de animales de UA)”.
Según datos del Departamento de Transportes de Estados Unidos recogidos por The New York Times, 35 animales murieron en los Estados Unidos en 2015 en viajes de 17 compañías aéreas. De ellos, 14 fallecieron en vuelos de United Airlines.