Padres e hijos versus tecnología: errores comunes

La Asociación Americana de Pediatría ha determinado —con ayuda de psicólogos y docentes— cuáles son los errores más comunes que cometen los padres con sus bebés frente al uso de la tecnología; y proponen alternativas para estimular la materia gris y el desarrollo psicomotor de los más pequeños de la casa.

Darle de comer mientras miras tú teléfono

Es una escena común: en el trabajo, en el bus, en cena con amigos o en el sofá... El teléfono se ha vuelto un compañero inseparable que demanda atención a cada momento. Por eso, cuando cuidamos o alimentamos a un bebé, este también suele acompañarnos. De pronto estamos más pendientes de lo que aparece en la pantalla que de las reacciones que tiene el niño con la comida.

Recomendación: La Organización Mundial de la Salud (OMS) aconseja centrarnos en comer sin que otros estímulos nos distraigan, esto incluye hacer a un lado el teléfono y el televisor. “La hora de la comida es un momento muy bueno para fortalecer el vínculo padre-hijo. No hacerlo genera futuras inseguridades”.

Ponerle contenido en chino para que aprenda el idioma

Las series infantiles como Dora, ahora —además de en inglés— también están disponibles en chino. Una jugada para ganarse a los padres preocupados porque sus hijos aprendan “el idioma del futuro”. Los expertos aseguran que no es la forma ni el tiempo. Un niño debe adquirir el lenguaje interactuando primero, no a través de una pantalla.

Dormir con un programa de televisión

BabyTV, un canal de FOX International, ha creado el programa ‘Hora de dormir’. También está ‘Hora de ensueño’, ‘Dulces sueños’, ‘La luna y las estrellas’ y ‘Abrazos de buenas noches’, estos espacios han sido pensados para ayudar a los bebés (y por ende a sus padres) a dormir plácidamente. Sin embargo, ayudarse de este tipo de programas es peligroso porque se expone a que el bebé sea incapaz de dormirse sin ellos.

Recomendación: Para que los niños concilien el sueño fácilmente conviene bajar su activación, darles un baño, bajar las luces de la habitación y ponerle el pijama. Mantener una rutina crea un entorno seguro y ayuda a que el bebé baje la guardia y se relaje.

Dejarle la tableta con juegos infantiles

El uso prematuro de dispositivos como tabletas provoca sobreestímulos adictivos para los que el cerebro del bebé no está preparado. La tecnología refuerza la idea de la inmediatez: lo que quieren lo tienen al instante en una pantalla, entonces no aprenden a gestionar la frustración ni desarrollan la paciencia.

Darle el móvil cada vez que lo pida

El niño debe saber desde el principio que el teléfono no es un juguete. Lo recomendable es retrasar el contacto de los pequeños con los móviles y en su lugar realizar actividades juntos e interactuar hablando con ellos e intercambiando palabras y miradas. Cuando el niño reclama atención necesita gastar energía y que jueguen con él.

Ponerle Beethoven para despertar su interés por la música

Si tienes que ponerle a tu hijo dibujos porque no puedes sentarte a jugar con él, la opción menos mala es que sean programas educativos. Pero hay que dejar claro que no es algo positivo. Si lo que buscamos es despertar su interés por la música, lo más efectivo es jugar con ellos haciendo actividades que impliquen cierto movimiento mientras suena música en el cuarto.