Amigos e hinchas llegaron al complejo

Las llamadas eran constantes por parte de José Batallas, amigo de la infancia de Julio Angulo, jugador del Independiente del Valle. Él llegó ayer al complejo del plantel sangolquileño para saludar con su amigo y desearle suerte. A penas salió el futbolista de la concentración para caminar por el complejo, José lo llamó tal como lo hacía en el barrio donde ellos crecieron. Con un silbido el futbolista reconoció a la persona que estaba arrimado sobre las rejas.

LE DIO LA ENTRADA

Angulo se acercó y saludó con su 'pana' con el cual jugaban fútbol desde pequeños. La conversación fue rápida. Duró apenas cinco minutos antes de que algunos hinchas invadan al jugador para pedirle autógrafos.

"Vine a saludarlo porque crecimos juntos en el suburbio. Ahora me alegro verlo donde está con mucho sacrificio y vine además para desearle suerte en esta final, junto a todos los muchachos', manifestaba emocionado José.

El jugador sangolquileño ingresó a su dormitorio dentro de la concentración. Fue a buscar una sorpresa para su 'pana' quien viajó todo la noche desde Guayaquil. En un rincón, cerca a la puerta, entregó una entrada para que acuda al al estadio y pueda ver el partido.

"No me esperaba esto, me dijo que vaya con toda su familia a ver el fútbol. Le agradezco porque mi deseo era ir a verlo en el estadio. Ahora iré a tribuna a alentarlo y gritar los goles del Independiente", finalizó.

 

CARGAMENTO DE CAMISETAS

Cerca del medio día algunos hinchas llegaban a los exteriores del complejo para tratar de mirar a los jugadores del Valle quienes estaban en el almuerzo.

Mario Lema parqueó su vehículo el cual llevaba una pequeña bandera del club. Junto a él estaban sus tres hijos Santiago, Martín y Alexander, quienes portaban las camisetas del equipo de sus amores.

Su intención era muy grande ya que debían firmar siete indumentarias más para toda su familia. Al principio se complicaba ya que ningún jugador aparecía. Pero al ver que Angulo conversaba con la gente y se tomaba pocas fotografías, se lanzaron contra él.

“Es la emoción de mis hijos, ellos me trajeron al complejo ya que quieren jugar aquí en el equipo y les cumplí ese sueño. Estamos esperando que salgan más jugadores especialmente Junior Sornoza y Arturo Mina”, decía el padre mientras veía a sus hijos saludar al volante. (DC)