Exclusivo
Deportes

Carlos Luis Morales y su hija Alejandra, amor de padre y de fútbol.Cortesía

Barcelona SC vs River Plate: hija de Morales recuerda su icónica atajada de penal

Alejandra Morales revive el penal que su padre atajó en Barcelona SC vs River

El 12 de septiembre de 1990, Barcelona vivía una de las noches más inolvidables de su historia. En Guayaquil, el equipo torero se enfrentaba a River Plate por un lugar en la final de la Copa Libertadores. El arquero del club canario, un joven Carlos Luis Morales (+), a quien le decían Pestañita, de 25 años entonces, vestía un buzo multicolor que con el tiempo se volvió legendario. Aquella noche, el Ídolo del Astillero escribió una página dorada de su historia.

Los penales definieron el partido. Morales, con temple de acero, detuvo el remate de José Serrizuela, a quien ya le había tapado un penalti en el cotejo de ida en Argentina, lo que evidencia el rol decisivo que tuvo Pestañita. De esa manera Barcelona, por primera vez, se metía en una final de Copa Libertadores.

Alejandra Morales y la foto famosa de su padre Carlos Luis.Cortesía

Tres años después de esa gesta nacería Alejandra Morales, su hija, quien hoy lleva siete tatuajes en honor al recordado guardameta amarillo. Uno de ellos es precisamente una imagen de aquel icónico momento: Morales de rodillas celebrando eufórico.

Alejandra estuvo presente en la reciente fiesta del Centenario de Barcelona, representando a su padre. Conversamos con ella a pocos días del reencuentro entre Barcelona y River, 35 años después.

El buzo que usó Carlos Luis Morales contra River en Guayaquil, ha pasado a formar parte de la memoria colectiva. Parecía una pantalla de televisión.

Nací en 1993, pero él me contaba que no eligió ese buzo. Les pedía a personas que viajaban que le trajeran buzos de otras partes. Le gustaba marcar una diferencia en la cancha, hacer una moda. Tenía varios: uno rojo con rayas negras, uno morado, uno celeste... Pero ese buzo lo marcó porque fue el que usó en los penales que lo llevaron a la final.

¿Qué te contaba sobre ese penal a Serrizuela?

Me decía que normalmente un arquero se lanza a la izquierda o a la derecha, pero algo le dijo que se quedara parado y apenas se inclinara a la izquierda. Y eso hizo. Porque, como él decía, casi siempre patean a un lado, pero ese día fue al centro… y él se quedó ahí y lo atajó.

Alejandra Morales en el estadio Monumental.Cortesía

¿Cuál es la anécdota familiar que más has escuchado acerca de ese partido?

Siempre la contamos en familia. Si se fijan en el video, (cuando el último lanzador de River falla) él coge el balón y lo patea hacia la tribuna, y le cayó a mi mamá en las manos. Él sabía exactamente dónde estaba ubicada su familia. El balón rebotó y otra persona lo cogió, pero esa es una de las anécdotas más lindas: cómo él sabía dónde estaban los suyos y les dedicaba cada momento.

¿Cómo vivías el acecho de los hinchas? Él siempre era el centro de atención.

Era impresionante. Lo respetaban, lo querían. Él dejaba de comer, de conversar, para tomarse una foto o dar un autógrafo. Decía que entendía que para alguien pedir una foto podía dar vergüenza, así que se esforzaba por hacerlos sentir cómodos. Yo me sentía orgullosa. ¡Ese era mi papá!

Nunca negaba una foto ni una entrevista.

Jamás lo vi negarse a un autógrafo, un abrazo, nada. Lo que sí hacía era evitar salir. Prefería comer en casa, no le gustaban los centros comerciales porque no podía caminar tranquilo. En los 90, no podía ni dar un paso en la calle. Pero también necesitaba el cariño de la gente. Y cuando salía, lo disfrutaba.

De seguro viviste muchos momentos de esos con él.

Sí, muchas veces. Estábamos comiendo y yo le decía: “Papi, te quieren para una foto”, y él se paraba sin dudarlo. A veces no creían que yo era su hija, porque no me parezco tanto a él, más bien a mi mamá. Nos veían abrazados y pensaban otra cosa. Él gritaba “¡amor de mi vida!” y todos se quedaban mirando. Me daba risa, pensaban que era mi ‘sugar daddy’. ¡Pero no me importaba! Él era mi papá y me encantaba el reconocimiento que él recibía.

Un tatuaje en honor de su padre y la banda de capitán.Cortesía

¿Qué habría pasado si tu papá hubiera tenido redes sociales en su época de jugador?

Creo que, por suerte, no existían en ese tiempo. Pero si las hubiera tenido, habría sido una locura. Si ya fue ídolo sin redes, con ellas habría sido el ídolo de todas las generaciones. Un fenómeno internacional.

¿Qué opinas del partido Barcelona vs. River actual?

Es un partido ganable. Estamos al mismo nivel. En Buenos Aires no hicimos un mal partido y espero que en el arco norte (el que lleva su nombre) no entre ningún gol. Que esté bendecido.

¿Cómo ves a los arqueros actuales?

Me encanta cómo tapa José Contreras. Tenemos arqueros seguros. Yo digo que en el arco norte no va a entrar ningún balón.

¿Hay algún arquero que te recuerde a tu papá?

No conozco a ninguno. Lo que lo llevó lejos fue su disciplina, su perseverancia. Lo veía viendo videos y decía: “Estoy trabajando para ser uno de los mejores”. Y lo logró. Aunque su carrera terminó muy joven, a los 34 años.

¿Crees que alguien podría parecerse a él en carácter y amor por el equipo?

No. No creo que exista alguien que haya amado a Barcelona como él. Que lo respetara tanto y lo demostrara en la cancha. Él se comía la camiseta. Hoy no veo a alguien así.

Alejandra Morales y Carlos Luis Morales una de sus últimas fotos.Cortesía

¿Y tú, cómo te llevas con el deporte?

No soy buena, practico crossfit, pero en fútbol soy malísima. Uno tiene que ser sincero. No me gusta hacer el ridículo (ríe). Pero mi hija, que tiene 12 años, sí es buena con el balón. Aunque sinceramente, no me gustaría que entre en el mundo del fútbol.

¿Y qué dice tu hija sobre su abuelo?

Lo ama, lo admira, aunque lo disfrutó poco: solo siete años. Pero fue una de las que más cerca estuvieron de él en sus últimos días. Siempre saca pecho y dice con orgullo: “Carlos Luis Morales es mi abuelo”.

Para más noticias de este tipo, ¡SUSCRÍBETE A EXTRA!