Barcelona y el Ministerio del Deporte de Ecuador bien podrían vender a Netflix la historia que están viviendo. Es que tiene todos los elementos: drama, intriga, vicio (dicen que hay un poco de trago de por medio), abogados de lado y, lo más importante para las grandes cadenas de streaming, una audiencia fabulosa por saber en qué queda la presidencia del Ídolo.

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Aquí le contamos cómo sucedieron los hechos, que implican a varios protagonistas.

Todo comenzó el 19 de diciembre con una resolución del Ministerio del Deporte, cuando le dijo ‘no’ al registro del nuevo directorio de Barcelona, liderado por Antonio Álvarez. Ahí mismo le advirtió que el club tenía 10 días para presentar los documentos y así subsanar ciertos incumplimientos.

Los hinchas de Barcelona se pasaron Navidad 2023 y Año Nuevo esperando noticias, pero nada de nada.

INTERVIENE LA JUSTICIA

El 3 de enero, la trama empezó a ponerse más interesante. Ese día se reveló una resolución judicial que nace de una acción de protección presentada por el socio Carlos Nahón.

El juez Josafat de Jesús Mendoza Villamar resolvió que Antonio Álvarez siga siendo presidente del club hasta que se resuelva el tema, y que el Ministerio del Deporte registre a su directorio de manera oficial.

La resolución tenía dos puntos claves: 1.- Que el Ministerio del Deporte se abstenga de emitir una respuesta al proceso de inscripción del directorio de Barcelona SC.

2.- Que el Ministerio inscriba al directorio de Barcelona, presidido por Antonio Alvarez Henriques, hasta que la acción de protección sea resuelta.

Ese día el Ministerio no dijo nada, dejando en el aire la expectativa de su respuesta. ¡A preparar el canguil, entonces!

LA LLAMADA CON ‘TRAGOS’

Antonio Álvarez se puso en acción y anunció que Barcelona ya tenía nuevos jugadores. Señaló que a pesar de la situación, ellos tenían al día al equipo y que habían hechos inversiones para viajar a Miami para la pretemporada. “Es penoso todo lo que ha sucedido en el club, una película de terror (...) No hay un directivo inscrito y seguimos poniendo dinero (...) lo hicimos por amor a Barcelona”, expresó Álvarez.

Pero lo que dejó a todos con la boca abierta fue cuando Raúl Chávez, vicepresidente administrativo del club, comenzó a decir que había recibido presiones. “A vísperas de fin de año, este mismo señor llamó a nuestros abogados en estado etílico para querer presionar, cuando ya nos había dicho que cumplíamos todo”, denunció Chávez.

Ese mismo día, salió un comunicado que, en resumen, señala que ante la acción de protección presentada por un socio de Barcelona, el Ministerio de Deportes “informa que el contenido de la demanda y su calificación se encuentra en proceso de análisis”. ¡La gente quedo en las mismas!

QUE DEN EL NOMBRE

El viernes 5 de enero como previa del Día de Reyes, el Ministerio le pidió precisiones a Raúl Chávez sobre el funcionario que habría llamado en supuesto estado etílico a presionar a Barcelona.

Lo raro del comunicado en que se invitaba a Chávez a especificar el nombre del abogado del club con el cual asegura se comunicó “el mencionado funcionario, que al día de hoy ya no está vinculado a este Ministerio”. ¿Es decir si existe ese funcionario? ¿Quién es?

Lo que el Ministerio quería, además, es pruebas, y por eso pedía “publicar y denunciar, sin cortes ni ediciones, el audio que sostienen tener en su poder”.

Pero ese mismo día, Alfonso Harb, expresidente del Ídolo, en su cuenta de la red social X difundió parte del supuesto audio de la persona que habló con Chávez. El audio solo dura 22 segundos, pero se cree que hay más.

Así, la telenovela entre Barcelona y el Ministerio del Deporte se pone más candente, debido a que el ministro Andrés Guschmer está fuera del país y se rumora ya que podría renunciar a su cargo.

Mientras tanto, el elenco torero completó su primera semana de pretemporada sin que su directorio sea inscrito oficialmente. Hay drama para largo. 

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