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Los tres sobrevivientes del Chapecoense alzan la Copa Sudamericana
Los tres jugadores del Chapecoense que sobrevivieron al accidente aéreo que diezmó al equipo en noviembre pasado alzaron el sábado la Copa Sudamericana-2016 en el estadio Arena Condá, en Chapecó.

La Copa le fue atribuida al Chape a pedido del colombiano Atlético Nacional, con el que debía dirimirla.
Los tres jugadores del Chapecoense que sobrevivieron al accidente aéreo que diezmó al equipo en noviembre pasado alzaron el sábado la Copa Sudamericana-2016 en el estadio Arena Condá, en Chapecó, sur de Brasil, antes de un partido amistoso del plantel reconstituido ante el Palmeiras.
El arquero Jackson Follmann, que sufrió la amputación de parte de la pierna derecha tras la tragedia, enarboló junto al defensor Neto y al lateral Alan Ruschel, el preciado trofeo, bajo una salva de aplausos. Las esposas de las víctimas del accidente ingresaron luego al césped, donde se les entregó las medallas que hubieran recibido sus maridos, en una ceremonia cargada de emoción.
La Copa le fue atribuida al Chape a pedido del colombiano Atlético Nacional, con el que debía dirimirla.
El accidente se produjo el 28 de noviembre, en las montañas colombianas, cuando el equipo brasileño se dirigía a Medellín a jugar la el partido de ida de la final de la Copa Sudamericana-2016.
De las 77 personas que iban a bordo, 71 perecieron. Los otros sobrevivientes son el periodista radial Rafael Henzel y dos tripulantes bolivianos.
La mitad de la recaudación se destinará a las familias de las víctimas y la otra mitad a la reconstrucción de club, que contrató a 22 jugadores para recomponer sus filas.
Empate en amistoso ante el Palmeiras
El nuevo Chapecoense empató 2-2 en casa ante el campeón brasileño Palmeiras, en el primer partido que disputó desde el trágico accidente aéreo que sufrió en Colombia el pasado 28 de noviembre y que marca el “renacimiento” del club.
En un encuentro amistoso, el Chapecoense entró en acción con una plantilla totalmente renovada. El club de Chapecó mostró personalidad, realizó un partido sólido y se situó al nivel del campeón brasileño, el último equipo con el que se enfrentó el pasado año antes de la tragedia que truncó el sueño de llegar a la final de un torneo internacional.
Douglas Grolli y Amaral pusieron los dos goles del Chapecoense, mientras que Raphael Veiga y Vitinho marcaron para el Palmeiras, que está bajo el comando del técnico Eduardo Baptista tras la salida de Cuca.
Hinchas, jugadores y familiares de los fallecidos aplaudieron, lloraron y cantaron juntos al grito de “Vamo, vamo, Chape”, una estrofa que se ha convertido en un cántico de guerra para el equipo.
Los aficionados se volcaron durante todo el partido con los jugadores, lanzaron mensajes de apoyo y ondearon banderas de Colombia, como agradecimiento por la ayuda que los colombianos prestaron tras la tragedia.