SUSCRÍBETE
Diario Extra Ecuador

Club Don Q: 80 jóvenes entrenan balonmano en Guayaquil, pero podrían quedarse sin cancha

El equipo campeón nacional celebra las fiestas en medio de la incertidumbre de quedarse sin sede para la temporada 2026 donde deberá refrendar el título

Jugadores y cuerpo técnico de Don Q siguen entrenando, pero sin saber dónde trabajarán en 2026.

Jugadores y cuerpo técnico de Don Q siguen entrenando, pero sin saber dónde trabajarán en 2026.Jerson Ruiz / Expreso

Jerson Ruiz
Publicado por

Creado:

Actualizado:

Cada semana, alrededor de 80 niños y jóvenes cambian la calle por una pelota de balonmano en el parque de la ciudadela Kennedy, en el norte de Guayaquil. Llegan desde sectores como Socio Vivienda 2, Durán, Mapasingue, Lomas de la Florida y otros rincones de la ciudad, atraídos por un proyecto deportivo que va más allá de la competencia.

Se trata del club Don Q, una agrupación que no solo forma deportistas, sino que construye disciplina, valores y sueños en contextos donde el acceso al deporte no siempre es fácil.

Un club liderado por un mundialista ecuatoriano

El proyecto está encabezado por Eduardo Quiñónez, seleccionado ecuatoriano y goleador del Mundial de Balonmano 2022, torneo en el que firmó una cifra histórica para el país: 112 anotaciones. Junto a él trabaja Yajaira Mosquera Escobar, entrenadora y dirigente del club, encargada de organizar entrenamientos, cuidar a los chicos y sostener el proyecto cuando el cansancio o la falta de recursos aparecen.

Entrenan los lunes, miércoles y sábados, pero el fin de semana pasado fue distinto. Entre risas, caramelos y juguetes, Papá Noel llegó al parque para celebrar la Navidad con los jugadores. Sin embargo, detrás del festejo se escondía una preocupación que inquieta a todos.

A la premiación por el título 2025 llegó Papa Noel y repartió regalos y algo de esperanza.

A la premiación por el título 2025 llegó Papa Noel y repartió regalos y algo de esperanza.Jerson Ruiz / Expreso

Campeones nacionales, pero sin casa para entrenar

El parque de la ciudadela Kennedy será remodelado en los próximos meses, y el club Don Q se quedará sin su espacio habitual de entrenamiento. Por ahora no hay una sede alternativa confirmada, aunque ya comenzaron las gestiones y la búsqueda de una cancha.

La situación contrasta con el presente deportivo del equipo. En 2025, Don Q fue campeón nacional de balonmano en la modalidad sala, tanto en la rama masculina como femenina. Además, dominó el circuito nacional de balonmano de playa, consolidándose como uno de los clubes más fuertes del país.

La pregunta surge inevitablemente: ¿puede un club campeón quedarse sin cancha? La respuesta, por ahora, es sí.

Siga leyendo: (Eryc Castillo fue figura en Alianza Lima, renovó contrato y analiza un futuro regreso a LigaPro)

Fe, trabajo y una preocupación compartida

Antes del festejo navideño del sábado 20, el pastor Galo Pinela, de la Iglesia de Dios Comunidad de Fe de Socio Vivienda 2, elevó una oración junto a los chicos. Luego llegaron los abrazos, las fotos y los dulces. El cuerpo técnico estuvo completo: Yajaira Mosquera, Santiago Quinde (arquero de la selección ecuatoriana), Ricardo Santander y Hayde San Lucas, entrenadora de bádminton.

“Es época de Navidad y deberíamos estar muy felices. Lo estamos por lo logrado como club, pero el tema de la cancha nos tiene preocupados a todos. Hemos comenzado a buscar y no tenemos respuestas”, confiesa Quiñónez, con la serenidad de quien carga una gran responsabilidad.

Yajaira, mientras reparte dulces entre los más pequeños, resume el espíritu del club: “El balonmano es una familia que crece todos los meses. Siempre falta apoyo, pero Dios pone corazones buenos que nos dan la mano”.

Decenas padres de familia y jugadores llegan todos los lunes, miércoles y sábados a la Kennedy.

Decenas padres de familia y jugadores llegan todos los lunes, miércoles y sábados a la Kennedy.Jerson Ruiz / Expreso

Un futuro que necesita espacio

Mientras continúan las reuniones y las gestiones sin una solución concreta, el balonmano ecuatoriano sigue creciendo. Ecuador ya estuvo en un Mundial en 2022 y este grupo de jóvenes quiere ser parte del futuro de la selección.

El deseo es simple: una cancha donde entrenar y seguir soñando. Ojalá que, además de regalos, Papá Noel deje un espacio para que el club Don Q no pierda su casa deportiva. Quizá no en 2025, pero sí antes de que los sueños se queden sin un lugar donde volverse realidad.

tracking