El jugador de Emelec, Cristian Arana, con contrato hasta el 30 de diciembre del 2017, por medio de la Corte Nacional de Justicia Indígena, exige al club eléctrico la cancelación de 297.900 dólares. Valor que será saldado mediante el embargo de las cuentas corrientes o de ahorros del equipo, o en última instancia la incautación de la taquilla que se recaudará en el partido de este miércoles 13 de diciembre entre Emelec y Delfín.

La Autoridad de las Nacionalidades y Pueblos Indígenas-Afro del Ecuador, comunicó el 11 de diciembre a la Federación Ecuatoriana de Fútbol (FEF) y al club correspondiente la respectiva demanda, otorgando así 72 horas para cancelar lo adeudado. En caso de que esto no suceda, los organismos deberán proceder a lo que pide la parte demandante, según manifestó Manuel Peñafiel, presidente de la Corte Indígena.

“Se me está faltando al respeto, llevo un año y seis meses sin recibir un centavo. No se me permite ingresar al complejo de los Samanes, me cerraron las puertas completamente”, expresó el portero, quien justifica el proceso debido a la demanda de alimentos que tiene en su contra.

Según Peñafiel, Emelec puede apelar y llegar a un acuerdo de pago siempre y cuando se hagan responsables en su totalidad de la deuda. Sin embargo, aseguró que existen irregularidades en el contrato de Cristian Arana, quien posee doble contrato, uno por $ 600 y otro por $7.500.

“Yo he querido mediar en varias ocasiones, pero no he tenido respuesta alguna. Ahora estoy aquí reclamando mis derechos”, mencionó el jugador.

A pesar de lo manifestado por la parte demandante, el gerente de Emelec, Luis Idrovo, dijo que a la instalaciones del club no ha llegado ningún documento. Ante esto, la Corte aseguró que en caso de que no se cancele la cantidad especificada, se notificará a la Superintendecia de Bancos para que proceda a la incautación de las cuentas del club.