El nuevo técnico de Universidad Católica, Santiago Escobar ya trabaja en la plantilla de la próxima temporada. El equipo tuvo una segunda etapa muy mala, marcada por varias lesiones y bajo rendimiento de varios jugadores, por lo que el colombiano ya piensa en los refuerzos para encarar el 2018.

Escobar quiere sumar “siete refuerzos entre jugadores nacionales y extranjeros”, pues según explicó en dialogo con los medios, considera que la base de jugadores jóvenes necesita el aporte de nombres con experiencia para poder sostener un buen rendimiento.

La dirigencia de Católica mantiene un proyecto institucional en el que pretende formar futbolistas, antes que ficharlos, sin embargo estarían dispuestos a atender el pedido del entrenador, ya que tampoco se está descuidando el trabajo en las menores. De hecho en los últimos días Escobar ha observado a varios juveniles con el afán de darles espacio en el primer equipo.

Además tampoco se darían movimientos importantes en cuanto a la cuota foránea, ya que Facundo Martínez mantiene contrato, al igual que Guillermo de los Santos. La renovación de Hernán Galindez también se concretó en los últimos días y estaría encaminada la de Luis Miguel Escalada.

Capitulo aparte es Matías Defederico, el nombre más cotizado de la plantilla, quien terminó contrato con el club y deberá decidir su futuro al cerrar el torneo, pues Católica sí le extendió una oferta que él se encuentra analizando.