Ecuador llega con vida, con fe y con garra al tercer partido del Mundial Femenino Sub-17 en Marruecos. El viernes 24 de octubre, desde las 08:00 (hora de Ecuador), las chicas de Víctor Idrobo se juegan el pase a los octavos ante China, una potencia que en esta categoría mete miedo, pero que también puede caer si la Tricolor juega con el corazón que mostró ante Noruega.

Ambas selecciones llegan con tres puntos. Pero hay algo que Ecuador tiene de sobra: hambre, ilusión y un sueño compartido. El partido va por la señal de Teleamazonas, DSports y DGO y se lo jugará en la Academia de Fútbol Mohammed VI, en Rabat.

Llenas de ilusión para enfrentar a China

Ecuador debe de ganar si o si, tiene los mismos tres puntos que China.

Nayely Rodríguez, la arquera que se vistió de heroína tapando un penal clave, habló con la serenidad de quien sabe que ya marcó historia:

“Estoy contenta por ayudar a mi equipo, poder tapar el penal y creo que es algo que siempre he venido practicando, gracias a Dios se nos dio. Estaba convencida que iba a taparlo y dije tengo que taparlo. Es algo de equipo porque si ganamos, ganamos todas y si perdemos, perdemos todas”.

La arquera que antes no lo era

Lo curioso es que Nayely antes no era arquera. El destino la cambió de puesto y hoy la tiene bajo los tres palos del Mundial.

“Gracias a Dios soy arquera, estoy demostrando de qué estoy hecha, de dónde vengo y nada, que cumplimos los sueños que siempre hemos querido. Ahora que estoy acá, muy contenta y feliz de estar aquí. Ante China vamos a dar lo mejor de nosotras y que vamos a salir con todo”.

Y mientras Nayely salva, Maite Zambrano lidera. La capitana que marcó el segundo gol ante Noruega habla con esa mezcla de orgullo y humildad que solo tienen las que sienten la camiseta:

Ecuador ilusiona en el Mundial de Marruecos

Ante China se juegan la clasificación

“Ese gol nos dio un alivio de saber que ya, que pues habíamos ganado y con el esfuerzo de todo el equipo, el poder llegar y hacer el gol”.

Sobre el duelo ante China no se esconde: “Sabemos que el rival que nos toca no es fácil, es un rival muy difícil, pero creo que estamos capacitadas para lograr hacer un buen partido y Dios nos permita ganar. Todas nos transmitimos esa confianza”.

Y lanza su mensaje final sin miedo: “No me siento con esa presión de dar algo más por el equipo, porque creo que todas lo podemos hacer. Que nos vean en el partido, que nos apoyen y que nos den siempre ese aliento”.

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