Juan Dinenno: “Con la hinchada de Barcelona me saco el sombrero”

A pesar de que no jugó todos los partidos con Barcelona en la temporada 2018, el argentino Juan Ignacio Dinenno marcó 17 goles y fue el goleador de los toreros. Los hinchas esperaban que fuera ratificado para esta temporada, pero el delantero apareció en Colombia, donde lleva 9 tantos anotados en 14 juegos con la camiseta del Deportivo Cali.

Cuatro meses después de haber sudado la amarilla, Dinegol, como le dicen los aficionados caleños, cuenta su verdad desde territorio colombiano. Siempre cauto y pensando dos veces las respuestas, el rioplatense se confesó con EXTRA.

Por ahora la afición canaria lo sigue en redes sociales y festeja junto con él cuando hace un gol con los verdes de la capital de la música salsa.

Tus goles, en los tres últimos años, han trazado un importante camino en su carrera. Se puede decir, ¿de Rosario (Argentina) para el mundo?

La carrera del futbolista te permite conocer lugares por el mundo. Me tocó salir de Argentina porque no tenía continuidad y encontré en el Deportivo Cuenca una oportunidad muy linda de progresar, crecer. Eso hizo que pase a jugar en el equipo más grande del Ecuador, como es Barcelona, y ahora me encuentro en Cali, en un gran plantel que es uno de los grandes de Colombia con mucho sentido de pertenencia y al que defiendo con todo.

Lo tuyo fue una cosa de locos, llegaste al Cuenca sin estar actuando y todo cambió

Llegué sin tener continuidad durante un año y medio. Y fue un desafío grande estar en un país nuevo, pero gracias al Cuenca fue el comienzo de un camino muy bonito, y espero que sea por mucho tiempo más.

Llevas nueve tantos con el Deportivo Cali, varios de ellos han sido golazos.

Algunos fueron muy lindos, pero el último (que anotó) fue clave, debido a que en cuatro partidos no encontrábamos una victoria y fue la anotación que sirvió de mucho (2-0 contra Cúcuta). Pero lo que interesa es que el equipo siga adelante, estamos en una liga muy competitiva. Jugamos cada cuatro días. El calendario es muy apretado.

Se viene una seguidilla de encuentros muy duros.

En 2017 con el Cuenca, 2018 con Barcelona y 2019 en el Cali, presente con los goles... La responsabilidad del centrodelantero es mayor que el resto. Es el puesto que elegí y me toca rendir con mayor esfuerzo, pero el objetivo es el mismo de todos, ganar.

¿Quién extraña a quién, la hinchada a Dinenno o Juan Ignacio a Barcelona?

Te diré la verdad, para mí fue una gran experiencia jugar en Barcelona. Es el club más grande de Ecuador y eso lleva a muchas responsabilidades. Soy autocrítico, el año pasado no cumplimos los objetivos como equipo que era salir campeón. Ojo, esa es la meta todos los años.

Hicimos algo bueno de entrar a Copa Libertadores, pero después ocurrió lo de la eliminación. Lo tomé como una gran experiencia y acepté las críticas de la gente. Entiendo que son exigentes con el club que aman. Uno como jugador quiere quedar en la historia del club, más allá del dinero, pero no lo pudimos hacer.

Personalmente tengo una espina en ese sentido con Barcelona. La vida sigue y el desafío del Cali está ahora en una liga tan competitiva.

No sé si me extrañarán los hinchas por redes sociales, algunas veces recibí insultos, pero también apoyo.

Con la hinchada de Barcelona me toca sacarme el sombrero. Todo lo hace con pasión y lo hacen todo grande como es el equipo, debido a la cantidad de fanáticos que tiene es diferente al resto de los elencos, es algo único en el mundo a la forma como lo siguen en el país. Eso es algo que siempre valoro y llevo en el corazón.

¿Quién extraña más?

No te lo podría decir, extrañar se me hace difícil, porque ahora juego y me va bien. Llegué a un gran equipo como el Cali. Mejor pregúntale a un hincha si me extraña.

¿El hincha de Barcelona está pendiente de lo que te pasa?

El año pasado hice 17 goles y a la gente no le parecía que eran muchos. Entiendo que los hinchas son exigentes.

¿Cómo tomaste la eliminación de Barcelona de la Copa Libertadores?

Dolió muchísimo, tengo amistades y un cariño grande al club. Lamentablemente por algo que no quedó tan claro fueron eliminados. El plantel hizo todo por buscar esa clasificación, me siento representado por ellos y me afectó lo que pasó.

La pregunta del millón, ¿por qué no seguiste en Barcelona?

Es un tema que está fuera de mi alcance contestar, eso es de los dueños de mi pase con Racing. Además, me dijeron que tenían todo arreglado con el Deportivo Cali.

¿Algún día volverás a vestir la amarilla?

No sé, uno nunca sabe lo que pueda pasar. Estoy agradecido con lo que viví en Barcelona, el cariño de la gente es tremendo. Tuve momentos buenos y sentí la responsabilidad cuando las cosas no salían. Si me toca vestir la amarilla de nuevo lo haré con pasión, como en el año anterior, a pesar de las dificultades. Lo hice con mucha entrega por toda la gente que sigue al elenco.

¿Qué extrañas de Guayaquil fuera del fútbol?

El ceviche que es una delicia, aunque acá hay buenos, pero el de Guayaquil tiene una gran sazón. Extraño también el Monumental cuando estaba lleno, las veces que actué en Barcelona lo disfruté al máximo.

Cali es conocida por la buena salsa, pero a ti te encanta el rock...

Tenemos un grupo buenísimo, acá se escucha todo el día y es contagiante, pero con el baile estoy mal, no hago ningún paso. El ritmo es increíble.

Lorenzo, tu hijo, ahora suma camisetas, la de Racing, Cuenca, Barcelona y Cali.

Está muy pequeño, no creo que tenga una preferida. Cuando sea grande le explicaremos todo, por ahora creo que celebra el campeonato de Racing. Mientras sea feliz, todo está bien.

¿El sueño de Dinenno es Europa?

Tenemos un calendario tan apretado con el Cali que estoy dedicado por entero al entrenamiento y concentración. No pienso en el futuro. Ahora el esfuerzo físico y mental está en lo que podamos conseguir en la Copa Sudamericana y entrar entre los mejores ocho en el torneo local. Tengo una frase que dice que lo que atrae distrae, puede que por estar pensando en el futuro descuides el presente.

¿Siempre calladito?

He sido así siempre, me dedico a trabajar y cuento con el apoyo de mi señora Sofi, de Lorenzo, de mis padres y amigos. El gran secreto es dar lo mejor y ser mejor cada día.