Exclusivo
Deportes
Sofía, la niña que saltó la seguridad para tocar a Messi
La menor viajó con su familia desde Zaruma. En 2016 le dio alcance al argentino en un partido en España.
“Yo sabía que durante el día sería muy arriesgado ir por la piscina e intentar subir a donde él estaba. Me dije: mejor en la noche. Apenas lo vi caminando, una adrenalina vino a mi cuerpo y me lancé hacia él. Los policías me empezaron a seguir. Yo pateé un policía ¡Lo pateé! e intenté llegar a Messi. Un bombero me agarró y me detuvieron. Fui la única ahí”, cuenta Sofía, sorprendida de sí misma, mientras ve desde la puerta principal del hotel Hilton Colón el bus que lleva a los jugadores de la selección argentina hacia el estadio Capwell. Allí dentro iba Lionel Messi, el mejor jugador del mundo y el futbolista más aclamado en Guayaquil durante las últimas 24 horas.
Sofía ve con melancolía como su máximo referente se aleja. “Lo tuve ahí, cerquita”. Vestida con la camiseta del Barcelona de España y con un moño bien ajustado en su pelo rubio, la chica de 14 años saltó el intenso operativo de seguridad que protegió a los futbolistas albicelestes y estuvo a centímetros de tocar a Messi, el más protegido en la ciudad porteña.
Luego de la jugada extrema, alrededor de ella corrían policías, fanáticos, un niño intentó saltar una de las vallas y cayó. Sofía siguió observando el bus con un rostro de máxima meditación, mientras respiraba profundo, aún agitada por los regates y la velocidad que le aplicó a los agentes vestidos de negro. Y suelta otra vez: “Lo vi de cerquita”.
Todo es un torbellino de gente, pero ella pone su mirada en el horizonte. Aparecen desde atrás Jorge Toro y Rosario Apolo, sus padres. “Mijita, ¿qué pasó?”, preguntó la madre. “Nada, me agarró un bombero y me detuvo”, respondió ella resignada.
El padre, un señor de bigote canoso, que vestía camisa y pantalón formal color marrón, también estuvo emocionado por la historia de su hija y cuenta que viajaron desde Zaruma, El Oro, únicamente para ver a la Pulga. “Somos de allá, pero vinimos a hospedarnos acá solo para ver a Leo Messi, invertimos $450 dólares por una noche”, explica.
En 2016, unas vacaciones en España
Mientras sus padres hablan, Sofía sigue despistada dentro de sí, recordando cómo fue ver de cerca al mejor jugador del planeta y su máximo ídolo: “Amo el fútbol, lo practico desde los cinco años. Recuerdo que le pregunté a mi papá cuál era el mejor jugador del mundo y me dijo Messi. Yo lo confundía con Puyol, por su pelo largo en aquel tiempo. Lo empecé a ver y me encantó su juego, hasta lo fui a ver a Barcelona. Es una persona que admiro mucho y pienso seguir sus pasos”.
El año pasado la familia Toro Ampuero viajó a Barcelona de vacaciones para ver jugar al astro argentino. Sofía recuerda bien aquella noche de ensueño. “El Barza le ganó 6-0 a Sporting Gijón, fue un 23 de abril del año pasado (2016) y Messi hizo un gol”, rememora la niña de cabello rubio y se le dibuja una sonrisa.