Independiente del Valle ha mantenido históricamente un perfil bajo en la escena mediática, evitando el ruido farandulero del fútbol ecuatoriano. Sin embargo, la paciencia del club parece haber llegado a su límite.

 Todo comenzó tras las declaraciones de Luis Alfonso Chango, presidente de Mushuc Runa, quien desde las gradas del estadio Echaleche, en el último duelo por LigaPro, lanzó un dardo: “Era que traigan árbitros brasileños para que se roben el partido”, en clara alusión a lo sucedido en la Copa Sudamericana.

Independiente se vino con todo

La situación se intensificó con las palabras de Luis Zubeldía, exentrenador de Barcelona y ahora al frente de Fluminense, quien recordó en el programa Clank: “Hay un penal que me cobran allá por 2013. Se decía que Independiente del Valle tenía mucha influencia en la Federación y con los árbitros. Deller es un tipo muy militante”.

Estas declaraciones provocaron la reacción interna de Independiente del Valle. Andrés Larriva, dirigente y periodista, emitió un comunicado que marcó un punto de inflexión: “Independiente del Valle es un club distinto. Creemos en el juego limpio, en el esfuerzo, los procesos y en el trabajo bien hecho. Nuestra política ha sido mantenernos alejados de las polémicas y concentrados en nuestro trabajo, pero algunos se han aprovechado de eso y han cruzado la línea demasiadas veces. De ahora en adelante responderemos las calumnias”.

Que lo digan ante un juez

El mensaje fue contundente: “Quienes acusen al IDV de una irregularidad tendrán que probarlo. Dentro y fuera del Ecuador, nuestros resultados hablan por sí solos y no serán manchados por la ligereza o mediocridad de nadie”.

El comunicado también mencionó nombres propios: “En los últimos días, tanto Luis Alfonso Chango del Mushuc Runa como Luis Zubeldía, en distintos tonos y espacios, se han permitido acusar a nuestro equipo y sus dirigentes. No lo dejaremos pasar. Acusar a alguien de inmoralidades y trampas es un delito y deberán asumir la responsabilidad de sus palabras”.

Independiente del Valle informó que solicitó a la LigaPro iniciar un proceso sancionador contra Chango y Mushuc Runa por el episodio ocurrido al final del último partido, y anunció acciones legales formales contra Chango y Zubeldía: “Que repitan delante de un juez lo que gritan en la cancha o sus supuestos recuerdos en entrevistas. Si esto es lo que se necesita, lo haremos. Reciban el mensaje claro: el IDV se respeta”.

El club deja en evidencia que, más allá de su bajo perfil, no tolerará acusaciones infundadas y está dispuesto a defender su reputación con todo el peso de la ley.

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