¿Fiesta en el hotel tricolor o solo una reunión con música?

20 meses después un acto de indisciplina dentro de la selección ecuatoriana de fútbol vuelve a trascender. Es que en octubre del 2017, lo que empezó como un rumor, luego fue oficializado.

Cinco jugadores de la Tricolor se habían fugado de la concentración antes del partido frente a Argentina, válido por las eliminatorias al Mundial Rusia 2018.

Enner Valencia, Jhon Cifuente, Robert Arboleda, Joao Plata y Gabriel Cortez fueron anunciados como los indisciplinados en el combinado nacional, en ese entonces dirigido de forma interina por Jorge Célico.

Carlos Villacís, por esa fecha presidente de la Federación Ecuatoriana de Fútbol (FEF), anunció una sanción indefinida para todos, pero Superman, el Degollador y el zaguero central fueron perdonados por el actual técnico Hernán Darío Gómez, no así Plata y el Loco, que no volvieron a ser convocados.

En la reciente Copa América de Brasil se repite la historia, pero ya no son cinco, sino seis, según un tuit del periodista Reinaldo Romero.

Francisco Egas, titular de la Ecuafútbol, lanzó una frase contundente sobre el comportamiento de los seleccionados en suelo brasileño.

“Durante este período de competición se han evidenciado comportamientos que no van de acuerdo con nuestro deseo, ni las exigencias deportivas, hemos solicitado los informes y tengan la certeza de que sancionaremos de manera ejemplar a quienes hayan violado las más mínimas normas de conducta en concentración”, señaló el directivo.

Más tarde, otra versión circuló en redes sociales.

Es que sumado al fracaso tricolor en la Copa América de Brasil, ahora está en entredicho el profesionalismo de un grupo de jugadores del elenco nacional.