“Espíritus de argentinas ya descansan en paz"

Germania Salazar, Guayaquil

La médium Apolonia Suárez se encontraba en trance cuando el espíritu de Marina Menegazzo, una de las argentinas asesinadas en Montañita, supuestamente la invadió desde el más allá, justo en el instante en que tocó su foto.

La joven fallecida junto a su amiga y confidente María José Coni presuntamente “se manifestó” a través de Suárez. Porque las almas de algunas personas que sufren muertes violentas “quedan confundidas y apegadas a la tierra, de ahí que necesiten elevarse para ir a su morada final”, apuntó la médium.

Conmovida por la forma en que las muchachas habían perdido la vida, Suárez quiso conocer cómo se sentían e hizo una sorprendente revelación: “Ellas estuvieron aquí, recorrieron toda la zona de Montañita hasta que repatriaron sus cuerpos a Argentina”.

Con sus manos en la imagen de las dos chicas, la médium exhaló fuerte y las lágrimas se desbordaron por sus mejillas.

“No podía ser que estuviéramos muertas”, se preguntaba el supuesto espíritu. La impresión fue tan intensa que Suárez lanzó al piso un ejemplar de EXTRA, en el que se hablaba sobre el trágico caso. Ya no deseaba tocar más la fotografía de las jóvenes.

“Nos acercábamos a nuestros familiares, pero ellos no nos veían, no nos escuchaban”, insistía el aparente espíritu a través de la médium, mientras una vela encendida, colocada en un altar del hermano Gregorio, se prendía y apagaba constantemente. Entonces, un viento helado recorrió la casa.

“Yo estaba en la playa con María José. Nosotras no hicimos daño a nadie, no sé por qué nos hicieron esto. Solo quería regresar a mi casa, a mi ciudad”, suplicaba el presunto espíritu de Marina a través de la voz de Apolonia Suárez.

LAS CONCLUSIONES

Luego de unos pocos minutos, la médium salió de su trance y pidió un vaso de agua fresca. Le dolía todo el cuerpo. “Es terrible sentir la angustia que ellas sintieron mientras las asesinaban. Ellas tardaron en enterarse de que están muertas”, resaltaba temblorosa.

Según Apolonia, las dos argentinas guardaban “un secreto” que prefieren conservar. “Eran buenas personas, les gustaba divertirse, se llevaban muy bien y se querían mucho. Vinieron con el ánimo de divertirse. Hasta habrían pensado en ponerse un local, un negocio, pero todo quedó truncado por el crimen”, añadió.

A su juicio, ambas intentaron defenderse de sus supuestos victimarios, se abrazaron muy fuerte y se agarraron de las manos. Una se habría desmayado y, en ese instante, su asesino la habría atacado. “La más fuerte era la de cabello negro”, subrayó.

La médium indicó que la verdad saldrá a la luz. Además, su guía espiritual le dice que una tercera persona conocería lo ocurrido en el balneario. “Los detenidos saben la verdad y deben decirla”, puntualizó.

Hoy, según ella, las almas de estas amigas ya descansan en paz, luego de que las enterraran en Argentina, su país natal. Porque ellas ansiaban regresar a casa. Debido al profundo dolor que sentían por la tortura recibida en vida, necesitaban ser sepultadas.

La médium Vilma de Aulestia resaltó que cuando una persona fallece violentamente, a menudo su espíritu queda turbado: “No se dan cuenta de que ya no pertenecen al plano terrenal”.

Añadió que las chicas rondaron por toda Montañita, pero nadie las pudo escuchar o ver. “Solo pueden hacerlo quienes tengan desarrollados los dones necesarios”, matizó. Y concluyó que ellas todavía no pueden manifestarse muy bien porque tienen que pasar todo este “proceso de turbación”.