Foliculitis no es lo mismo que el acné

Miguel Ángel González, Quito
Asimple vista, la foliculitis puede confundirse con el acné, pues la principal característica de ambas enfermedades son las erupciones cutáneas. Y no distinguirlas correctamente, como en el caso de Armando, de 24 años, puede generar graves problemas.
Este quiteño, que padece foliculitis, siempre pensó que los granos de su rostro eran fruto del acné, de ahí que usara tratamientos para este mal, que nunca eran efectivos.
La dermatóloga Cecilia Cañarte explica que esta enfermedad es una inflamación del folículo piloso (donde nace el vello). Esto ocurre cuando la fibra capilar no traspasa la piel o, como comúnmente se dice, ‘se entierra el vello’ y se producen erupciones.
La especialista detalla que la afección se agrava cuando ingresa un estafilococo denominado ‘aureus’ y se forman granos similares a las espinillas, de ahí la confusión. “El acné, en cambio, se produce en las glándulas sebáceas, donde se acumula la grasa o sebo”, precisa la especialista.
Las personas que se depilan suelen padecer este mal porque no lo toman los cuidados estéticos necesarios. Es muy habitual que aparezca en la zona pélvica, las piernas, las axilas, la barba y hasta en el cuero cabelludo.
Si no se trata a tiempo y la foliculitis se torna severa, puede dejar cicatrices gruesas o parches en la piel, que son más oscuros de lo normal. Incluso puede destruir el folículo piloso, haciendo que se pierda para siempre el vello.
La exfoliación de la piel sana y el uso de cremas humectantes previenen que los vellos ‘se entierren’. Estas actividades pueden realizarse dos veces por semana durante el baño.
El dermatólogo Guillermo Izurieta puntualiza que los hombres, por lo general, tienden a padecer esta sintomatología en su piel por la secreción de testosterona.
El problema se agudiza si existe una predisposición del individuo a tensionarse. Eso derivará en una falta de sueño, lo que aumentará una producción de grasa en lugares como el rostro.

La nutrición
Al igual que Armando, todas las personas que sufran de foliculitis deben evitar excederse en el consumo de lácteos, alcohol o cigarrillos. “Debo reducir la ingesta de carnes rojas y comer más pescado”, expresa el joven.
Sin embargo, la nutricionista Verónica Chávez aclara que los alimentos no frenan la foliculitis, aunque el consumo de ciertos nutrientes pueden ayudar a controlarla. “La vitamina A fortalece la piel. Además, se puede ingerir vitamina E. Ambas son fundamentales para la epidermis”, subraya Chávez.
Los dos componentes pueden hallarse en la zanahoria, hígado, melón o también en frutas cítricas como la naranja. Están en los huevos, la leche, el yogur... Por su parte, la E puede encontrarse en hortalizas de hoja verde como las espinacas o el brócoli.
“Su consumo puede ser diario, en la dieta normal de una persona”, asevera la profesional, quien agrega que las grasas deben separarse del menú, así como los alimentos ricos en azúcares como los chocolates o las bebidas gaseosas.

 

Mejore hábitos y contrólela
El doctor Guillermo Izurieta explica que para contrarrestar la foliculitis, lo fundamental es mantener la higiene. “Siempre debe haber un aseo riguroso de la piel cabelluda y de las áreas donde hay vellos”, puntualiza.
En este sentido, puede ayudar el uso de un jabón antiséptico y de un champú especial. También añade las siguientes recomendaciones