China ha vuelto a captar la atención mundial con un impresionante despliegue de innovación y precisión: 11 787 drones sincronizados iluminaron el cielo en una coreografía aérea que no solo asombró a miles de espectadores, sino que también rompió dos récords Guinness. El evento se llevó a cabo recientemente y marcó un hito en la historia de los espectáculos tecnológicos.

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Una coreografía aérea a gran escala

Los drones despegaron al unísono y, bajo un sistema de control centralizado, formaron figuras tridimensionales que celebraban la identidad y la cultura china. Desde dragones y aves míticas hasta monumentos históricos, artes marciales y símbolos tradicionales, las formas se sucedieron con una precisión impresionante, desafiando los límites de la ingeniería aérea moderna.

La ejecución fue tan milimétrica que las imágenes parecían flotar estáticamente en el cielo, fusionando el arte digital con la tradición oriental.

Doble marca mundial

El evento no solo fue un espectáculo visual, sino también un logro técnico de gran magnitud. Se establecieron dos récords Guinness en la misma noche:

• Mayor número de drones volando simultáneamente, con 11 787 unidades en el aire al mismo tiempo.
• Mayor número de drones controlados desde un único sistema informático, lo que habla del alto nivel de desarrollo tecnológico detrás del show.

Estos logros superan la marca anterior de 5 200 drones impuesta por una empresa de Shenzhen, también en China.

Tecnología de vanguardia y precisión matemática

El responsable del espectáculo fue Damoda Intelligent Control Technology, una empresa china especializada en control de enjambres de drones. El sistema empleado permite dirigir miles de drones con una sola unidad de control, gracias a complejos algoritmos de inteligencia artificial y tecnología de posicionamiento de alta precisión.

Damoda ya había impresionado anteriormente al batir récords con 3 051 drones en 2020, y más tarde con más de 8 000 en 2024. Con este nuevo récord, consolida su liderazgo en la industria de los espectáculos aéreos.

Una alternativa sostenible a los fuegos artificiales

Más allá del espectáculo visual, este tipo de shows representa una alternativa ecológica y silenciosa a los tradicionales fuegos artificiales. Los drones no generan residuos ni contaminación acústica, y pueden ser reutilizados en múltiples presentaciones. En ciudades como Pekín y Shanghái, cada vez es más común reemplazar explosivos por tecnología para las celebraciones públicas.

Reacciones y perspectivas

Las redes sociales y medios locales se inundaron de imágenes y videos del espectáculo, que rápidamente se volvieron virales. La audiencia celebró la armonía entre innovación y cultura, destacando el impacto emocional que puede tener un show de esta magnitud.

China no solo busca entretener, sino también posicionarse como líder mundial en tecnología aplicada al arte, y todo indica que continuará elevando el listón.

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