Fausto Miño es un ‘duro’ para los negocios. Y, aunque en un principio, probó los conocimientos que tiene sobre gerencia en su carrera musical, actualmente le ‘llueven’ empresas que buscan su asesoría.

“No diría que soy un motivador, pero siempre termino motivando a la gente porque les doy herramientas poderosas para elevar su productividad”, dice.

Fue en 2015 cuando el artista supo que a su vida “le hacía falta algo más” y se vinculó en la ‘onda’ de tecnología administrativa Hubbard (una especie de escuela de gerentes). “Me preparé en Colombia, Aruba y México”, comenta.

Y aunque el cantante ambateño es actualmente experto en ventas, marketing, finanzas, formación de equipos exitosos y en comportamiento humano, la música siempre lo acompaña. “Nunca ha sido mi pasión, realmente, siempre ha sido mi mejor herramienta para comunicarme”.

Incluso fue en esa actividad en la que el artista experimentó sus técnicas de negocio y hasta llegó a triplicar la cantidad de conciertos que tenía. “Me presento, al menos, una vez por semana”, detalla.

Su teoría también ha sido probada en el negocio de su esposa, Carmen Borja. Se trata de una empresa que ofrece productos naturales para el cuidado personal. “En dos años creció diez veces de lo que era”, señala.

Pero más que los números lo que le entusiasma al artista es transformar la vida de los emprendedores, pues sus consejos, además de aumentar la productividad de las compañías, permite también un cambio de actitud en quienes las dirigen.

Y para estas capacitaciones muchas veces usa la música. “Es igual de prioritaria. Ayudar a la gente en su producción es más profundo, me hace sentir más realizado. Ha sido como juntar dos súper poderes”, confirma.

En su vida no existen poses. Él es el mismo que ven en sus redes sociales: un artista, un padre, un esposo, un amigo...

“Sería bien difícil andar con un disfraz todo el tiempo”, comenta.

No se cree un influencer. Dice que es un hombre con una comunidad a la que quiere y cuida. “Siento mucha gratitud”.

Lo han acompañado en todas sus facetas: músico, capacitador y ese ‘mix’ que hoy tiene con ambas.

Niñero feliz

Su día a día es muy relajado. Despierta temprano (a las 06:00) y cuida a su bebé Samuel hasta las 08:00. “Es el tiempito en el que Carmen puede descansar”.

A las 10:00 inicia su jornada, que trata de que no se extienda hasta más de las 16:00, pues trata de no perderse de la crianza de su hijo.

Los fines de semana los usa para sus shows. “Este fin de semana me presento en Latacunga, el próximo en Galápagos y después en Los Ángeles (EE. UU.)”.

Más de Fausto

La música

Su meta musical es componer dos temas al año y lanzarlos con todo y video. Su próxima melodía la produjo para su esposa y se llama ‘Te amo con el alma’.

El Apoyo

Miño siempre ha contado con el apoyo de su familia, incluso cuando a los 20 años les dijo que quería dedicarse a la vida artística.

Las críticas

Dice que no toma las críticas de los usuarios en redes sociales como algo personal. Entiende que quien las emite es alguien que sufre mucho.

Entregado

Cuando está en casa cuida del bebé de 7 meses. Le hace ejercicios de estimulación, le cambia el pañal y lo viste.