"Yllegó Superman, bailando el guaguancó...”. Son las 4 de la tarde y la salsa retumba en la sala de Kimbara Estudios, un espacio de 5x4 metros en el corazón del suburbio de Guayaquil, acondicionado con aislantes de ruido especialmente para ensayos musicales.

Allí, McKinney Ramírez, exvocalista de la orquesta Dimensión Latina, le ‘saca brillo’ al micrófono con su voz, durante los ensayos previos a su presentación que hará este domingo 30 de julio de 2023, en el evento llamado ‘Salsa Sunday’, que promete rumba hasta que el cuerpo se canse.

McKinney, quien llegó hace dos semanas a Ecuador, desde su natal Venezuela, cuenta que se ha visto muy sorprendido con Guayaquil y su gusto por la salsa. “Me llama la atención la forma cómo acá se vacila esta música”, asegura mientras cuenta que ya se ha pegado el viajecito “por diferentes salsotecas de la ciudad, como Cabo Rojeño y Ribogerto, y la rumba es de otro nivel”.

Y quien lo dice es un hombre de 41 años acostumbrado a este ritmo “desde muchachito”, cuando su mamá y su papá colocaban los discos de grupos como la Fania All Star y la misma Dimensión Latina, que tuvo entre sus filas a los famosos Óscar D’León y Andy Montañez.

McKinney también fue parte de esta agrupación fundada en 1972 y con la que grabó dos discos, entre ellos la producción 'Dimensión Latina, 31 años de salsa pura', en la que sonaban éxitos clásisos de los 70, como  Llorarás (éxito que hizo recontrafamoso Óscar D'León), Sigue tu camino, Param pam pam, Taboga y otras.

En un descanso del ensayo y mientras el dueño del estudio musical, Christian Poalacín, provee de agua a los muchachos del grupo, él insiste en que “sabía que este país era salsero, pero no tan salsero (...) Mientras haya ciudades como esta y países como Ecuador, la rumba está garantizada”.

De regreso, Mckinney une su voz con la de su hermano McBrian, por estos días más conocido como el Héctor Lavoe del programa ‘Yo me llamo’, quien también estará en el show del domingo 30.

Y la rumba vuelve a sonar en esa pequeña sala de de Kimbara Estudios, mientras los pies solitos van soltando los pasos. “Loco, loco, loco estoy, y cada día más loco”...

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