Debido a trabajos de mantenimiento de juntas, la Autoridad de Tránsito y Movilidad (ATM) comunicó el cierre nocturno temporal del paso elevado de la avenida Pedro Menéndez Gilbert, en dirección centro–norte, durante seis semanas. La medida forma parte del plan de mantenimiento vial de la ciudad y busca preservar la seguridad estructural de la vía, que ha sufrido desgaste natural tras años de uso constante.

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El Municipio de Guayaquil ha señalado que estos trabajos son necesarios, pero la decisión ha generado inquietud entre los ciudadanos, quienes temen que la obra se extienda más allá del tiempo previsto y afecte la circulación diaria en una de las arterias más transitadas de la ciudad.

Malestar ciudadano ante los cierres y obras en la ciudad

En los últimos meses, diversos cierres y obras viales han afectado puntos estratégicos de Guayaquil, abarcando desde pasos elevados hasta las principales avenidas de la ciudad. Aunque estas intervenciones son necesarias para mantener la infraestructura, han provocado congestión, retrasos y quejas constantes de los usuarios.

“Se entiende que hay que mantener las vías, pero seis semanas es demasiado tiempo para un solo tramo. Y todos sabemos que esos plazos casi nunca se cumplen”, señaló uno de los conductores consultados. Muchos consideran que los cierres simultáneos de vías en la ciudad generan congestión y complican los traslados habituales, reflejando una preocupación generalizada.

Especialistas en movilidad urbana, citados por EXPRESO, señalaron que se necesita una planificación más transparente y comunicativa, donde se detallen los cierres programados, rutas alternas y tiempos estimados de ejecución. De no hacerlo, advierten, las obras pueden percibirse como un obstáculo más que como una mejora en la infraestructura urbana. 

Rutas alternas y expectativas de los ciudadanos

A pesar de que la ATM sugirió desvíos y rutas alternas para aliviar el tránsito, la medida no ha sido suficiente para calmar las críticas de los ciudadanos. “Siempre prometen control del tránsito, pero al final el tráfico se vuelve insoportable”, comentó otro conductor afectado por el cierre.

Los habitantes esperan que los trabajos finalicen dentro del plazo establecido y que esta obra no se convierta en un proyecto que se extienda innecesariamente, afectando la movilidad y generando molestias adicionales en el centro de Guayaquil.

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