El hallazgo de un explosivo alarmó nuevamente a los habitantes del bloque 10 de Bastión Popular, en el noroeste de Guayaquil. Esta vez el artefacto fue dejado en la puerta de un bazar.

Un morador se percató de la presencia de un objeto extraño en los exteriores del negocio y alertó a la Policía.

Agentes del Grupo de Intervención y Rescate (GIR) llegaron al sitio, retiraron el explosivo, lo colocaron en medio de una llanta y realizaron la detonación controlada de la bomba.

El mayor Wilson Loaiza, jefe operativo del distrito Pascuales explicó que no se trataba de dinamita, que era un objeto cilíndrico de color rojo y que las investigaciones determinaran con que tipo de material fue elaborado.

Moradores atribuyeron el hallazgo a temas relacionados con 'vacunas', ya que no es el primer caso en que dejan un explosivo en un negocio de este sector para exigir dinero a sus propietarios.

Hace 15 días en este mismo sector, a escasos metros colocaron una bomba afuera del inmueble, provocando daños materiales en cuatro casas y en un vehículo.