Con unos zapatos negros y un cinturón guindados en la puerta de su vivienda, más su fe, la familia Mero Quijije espera que se localice el cuerpo de su ser querido desaparecido en el mar.

En su hogar, ubicado en la calle José Santos Bello, del cantón Jaramijó, provincia de Manabí, predomina el drama, dolor y desesperación desde el pasado 17 de marzo de 2023, cuando les llamaron para avisarle que José Sebastián Mero Quijije, de 60 años, había caído al océano.

“Hemos realizado una misa en la playa, aquí le rezamos en casa con velas encendidas y asimismo hemos colocado los zapatos de él y un cinturón como una creencia que acá tenemos. Hay familias que lo han hecho y sus seres queridos han aparecido a los 20 días o un mes”, dijo Karen López, nuera del pescador.

Mero desapareció, aparentemente, al caer de su panga de madrugada, frente a las costas de Esmeraldas. Sus amigos lo buscaron, pero no pudieron hallarlo.

Según la allegada, les informaron que hasta este miércoles 29 de marzo la Capitanía de Esmeraldas iba a realizar la búsqueda. Esa situación les agobia.

“Pedimos ayuda a los pescadores que andan en faena. Él anda con una chompa roja, una pantaloneta de agua y un pasamontañas. Estamos desesperados, pero no perdemos la fe”, dijo la mujer.

LA ÚLTIMA LLAMADA

El jueves 16 de marzo de 2023, Sebastián Mero llamó a su esposa, como era costumbre. Él preguntó por sus seres queridos y los dos nietos engreídos. Dijo que iba a llamar al siguiente día, pero no lo hizo, contaron los deudos mientras miraban sus fotos en una especie de altar en medio de la sala.

“Es muy triste sentir su ausencia. No tenerlo con nosotros es un dolor inmenso que solo quien ha pasado algo así puede entender. Rogamos que podamos encontrarlo”, finalizó Karen.