Dos tanqueros de Manta llegaron a suelo riosense, donde los contrataron con el ‘cuento’ de que iban a llenar una supuesta piscina de peces de agua dulce. Pero fue una coartada de cuatro pillos, quienes interceptaron a los vehículos pesados en la vía San Carlos, a 3 kilómetros de la urbe quevedeña, para secuestrarlos.

El jefe del circuito La Merced, Isaac Cárdenas, y el Grupo de Operaciones Motorizadas se activaron. A las 08:15 del 11 de octubre recibieron la alerta de lo acontecido y procedieron armar el operativo para dar con el paradero de los delincuentes.

Según fuentes policiales, estos tomaron una vía alterna y trasladaron en un auto a sus víctimas hasta el sector La Judith, vía a Valencia. Los encerraron en una casa y maniataron. Agentes dieron con los sujetos porque ubicaron el carro en el que se desplazaban y los detuvieron.

Uno de los pillos, registra varias detenciones. El individuo que había salido de la cárcel desde hace un mes, por un delito parecido.

La Policía los puso a órdenes de las autoridades competentes para la respectiva audiencia de formulación de cargos.

Una de las víctimas dijo que volvió a vivir, ya que no sabía qué les podía pasar. Ellos llegaron de la ciudad de Manta, sin sospechar que en Quevedo les intentarían secuestrar.