¿Y la lista de Odebrecht?...

El dragón de varias cabezas compra conciencias. Por nuestro país ha pasado comprando “las manos limpias” de ciertas autoridades del presente y anterior gobierno. Es un dragón que ha dejado huellas de inmunidad porque hay funcionarios que tienen fuero de corte, peces gordos que pretenden que no los conozca la ciudadanía.

La corrupción no tiene límites. La honestidad tampoco. Mejor dicho, la corrupción es la madre de todos los males. Por ello exigimos que la sociedad ecuatoriana conozca quiénes son los integrantes de esta mafia de corruptos y también de los corruptores. Estamos seguros de que el gobierno tratará de evitar que en sus cuadros importantes aparezcan involucrados. Es necesaria la participación de los activistas sociales que defienden los derechos humanos y que no están comprometidos con el régimen oficialista.

Por muchas causas, supuestamente, podríamos decir que ya se conoce la participación de determinados elementos en aquella época de corrupción, que unos pretenden llamarla la década ganada, cuando en realidad es la década perdida. Le corresponde al actual presidente demostrar que es consecuente con sus pronunciamientos cuando dice que “serán castigados caigan quienes caigan”.

Será difícil llegar hasta las últimas consecuencias porque algunos investigadores se han convertido en investigados. Dicho de otra manera, se está poniendo al ratón para cuidar el queso...

Si ya se sabe la lista de Odebrecht, ¿por qué se pretende que no sea conocida por todos? Es decir, son secretos a voces. ¿O será que están esperando que fuguen del país estos deleznables elementos que se han convertido en nuevos ricos y que ahora sabemos cómo adquirieron su fortuna?

Lcdo. Ricardo Ordóñez Jaramillo