Editorial: Las guerras entre pandillas

Casi todos los días se producen diferentes tipos de asesinatos a ciudadanos, en distintos lugares de las ciudades del país. La mayoría tienen un común denominador: “los ajustes de cuentas” entre los integrantes de las múltiples bandas y pandillas que existen. Se dan más en provincias del Litoral (Manabí y Guayas).

Este es un problema que, además, ocurre en otros escenarios: las cárceles en donde están recluidos, por distintos delitos, miembros y jefes de mafias y bandas criminales. Estos hechos que suceden en centros de detención y en las ciudades evidencian un fenómeno que debe preocupar a las autoridades, pues parece que esos maleantes se han declarado una guerra de exterminio en todos los frentes.

En las ciudades es por territorio (zonas y lugares) por donde circula y se compra-venden diferentes tipos de estupefacientes. En las cárceles, por mantener el control de estos espacios para instaurar un predominio de esas pandillas. Lo hacen para controlar la circulación de armas, celulares, drogas y para imponer distintos tipos de tributos a otros detenidos. No se sabe cómo y cuándo terminarán estos enfrentamientos. Lo único cierto es que no se van a detener hasta que uno de ellos imponga su dominio.