Opinión
Cartas al director
La invitada del día
Cuento de terror
Por: Silvia Buendía - @silvitabuendia
Lorena es médica veterinaria y vivía desde hace 12 años en unión libre con José. Durante ese tiempo compraron una casa, dos carros, un hospital y un crematorio para animales. Desde el primer día fue José quien manejó el patrimonio de los dos. Todos los bienes estaban a su nombre, incluso las cuentas bancarias. A finales de 2014 José golpeó a Lorena por primera vez. La convivencia se hizo imposible, decidieron separarse. Lorena se quedó en la casa.
El 29 de noviembre de 2015 José entró a la fuerza en el hogar de Lorena, la golpeó y le exigió que le devuelva la casa. Por vergüenza Lorena no puso la denuncia de esta paliza. El 16 de diciembre José volvió a casa de Lorena acompañado de tres hombres. La amenazó para que firme unos papeles. Ella se negó. Los cuatro la golpearon, le rompieron el celular. El 17 de diciembre Lorena fue a poner la denuncia. No la atendieron. Al día siguiente Lorena se encontró con que José ya había puesto una denuncia alegando que fue ella quien agredió a los cuatro hombres. La jueza de la causa dispuso que Lorena salga de su casa, que reingrese José y además otorgó medidas de protección para José. Esto sin tomar en cuenta que Lorena no tiene dónde vivir y que todos los bienes y el dinero que ha producido en su vida hoy los tiene José. Antes de que se notificara esta sentencia, José entró a casa de Lorena mientras ella no estaba y tomó posesión de la casa. Lorena no pudo sacar ni siquiera sus implementos de trabajo.
Esto que parece un cuento de terror es una realidad. Hoy es la nueva audiencia de este caso en la Unidad Judicial Casa de la Justicia número 1 de Quito.