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Opinión

Cartas al director: Ramón Unamuno Álvarez

Ramón Unamuno fue una figura destacada del deporte guayaquileño y ecuatoriano.

Ramón Unamuno fue una figura destacada del deporte guayaquileño y ecuatoriano. Para los jóvenes debería ser un modelo porque, superando deficiencias físicas, logró destacarse en las distintas canchas cuando el fútbol se lo jugaba únicamente por amor a la camiseta del club o del país, y no por el incentivo del billete.

Ramón Unamuno fue apodado el “Manco Unamuno”, y así lo conoció la afición de esa época y la de la posteridad. Para que su memoria perdurara por los siglos, en Guayaquil se construyó un estadio que, por décadas, lleva su nombre. En este estadio se efectuaron encuentros futbolísticos que transcendieron la historia.

Toda la populosa población adyacente a este escenario deportivo tuvo en el estadio “Ramón Unamuno” la oportunidad de desarrollar, en beneficio de la juventud, la práctica noble del fútbol. Se conoce que existe el proyecto de reubicar este estadio para convertirlo en apenas una cancha en el norte de la ciudad de Guayaquil. Los moradores de esta zona que conocieron al “Manco Unamuno”, cultamente han planteado su oposición a este traslado, porque consideran que sería degradar a este estadio y porque impediría que, con el cambio, los jóvenes que practican fútbol en esta zona tan populosa puedan entrenar en la nueva cancha que la van a ubicar al norte del Puerto Principal.

La razón no pide fuerza. Que se recapacite y se resuelva mantener el estadio Ramón Unamuno Álvarez en el sitio que actualmente ocupa. (BLC)