Cartas al director: ¡Queremos estudiar!...

¡Queremos estudiar! Sí, la carrera de nuestra elección. En un lugar cerca de nuestras familias. Con la opción de escoger entre una educación pública de calidad y una educación privada en libertad que compitan entre sí. Ese es el clamor de cientos de miles de jóvenes en el Ecuador.

Pero mientras lees estas líneas, la cruda realidad es que muchos jóvenes no logran ese ideal. Exactamente 890 mil jóvenes entre 15 y 29 años no estudian ni trabajan en el Ecuador, según el Banco Mundial y el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos. Un tercio son bachilleres. Unos se quedan sin cupo. Otros salen con enormes desventajas del colegio. A otros, simplemente no les alcanza la plata para el pasaje u otros gastos mínimos, peor en esta crisis económica. Y a muchos que sí ingresan, los mandan a otra provincia o a una carrera que no corresponde a su vocación.

Sin negar los avances en educación, esta realidad debe convocarnos a un acuerdo nacional más allá de ideologías y partidos. Un acuerdo para aumentar cupos, institutos y universidades técnicas, a fin de ampliar la oferta de educación pública. Para dar más ayudas directas al estudiante que elija la institución de su preferencia, a través de más becas y eliminar los intereses en créditos estudiantiles del Estado, que hoy cobra el 9%. Para igualar las oportunidades de los jóvenes con cursos gratuitos previos al examen, nivelando así las iniquidades de la educación secundaria, difíciles de corregir en corto plazo.

No es de volver al pasado, sino mirar el futuro. Y trabajar juntos por un Ecuador donde todo joven logre educación adecuada que le permita realizarse, emprender y conseguir empleo digno.

Ab. Héctor Yépez Martínez