Columnas: ¡Ahora viene la reconstrucción!

Luego de una estación lluviosa inclemente que nosotros llamamos “invierno” y que ha afectado a las carreteras en el país y, por ende, a la zona agrícola que ahora quiere “volver a empezar”, se conoce de nuevos préstamos millonarios y la prioridad es de las carreteras, pues de nada valdría construir 2 o 3 troncales si no se conectan con los espacios agrícolas donde gente laboriosa espera que lo que han cultivado sirva no solo para el consumo interno, sino para exportarlo, y así entrarán dólares que aliviarán el difícil panorama económico actual.

El mundo demanda alimentos, y el Ecuador los produce, dependiendo de la clase de semillas que solo los agricultores conocen.

No se puede desconocer que al país le vino “la salazón” por partida doble. Primero fue el terremoto que afectó a Esmeraldas y Manabí en grado superlativo; y luego las torrenciales lluvias capaces de ahogar toda esperanza.

Pero los ecuatorianos somos como el Ave Fénix y sabemos resurgir. Tenemos que arrimar el hombro, trazar las metas -bien planificadas- y decir allá vamos con modernas carreteras de cuatro carriles, pero construidas con todas las de ley para que duren y que no representen peligro para quienes las usen.

Una obra imperiosa es “unir al país”, y un mutuo respeto entre gobernantes y gobernados. Solo así podremos salir de estos malos momentos.