Columnas: ¡Ganamos!

El miércoles 14 de febrero se publicó en el Registro Oficial la resolución del CNE que proclamó los resultados definitivos del referéndum y consulta popular 2018. De esta manera, volvió a cambiar nuestra Constitución, las autoridades de elección popular podrán ser reelectas por una sola vez. Se recuperó así el mandato del artículo 114 de la Constitución de Montecristi y quedó sin efecto la reelección indefinida.

Hasta aquí las buenas noticias: ganamos. La mala noticia es que esta enmienda constitucional que efectúo la Asamblea Nacional el 3 de diciembre de 2015 nunca debió darse. Fue un horror que se llevó a cabo desde el poder en contra de la voluntad mayoritaria de un pueblo que salió a las calles a reclamar que se le consulte. La Corte Constitucional también tuvo responsabilidad en este disparate.

Le dio luz verde al referéndum en lugar de negarse señalando que la reelección indefinida viola principios básicos de la democracia participativa como la separación de poderes, la igualdad, la alternabilidad, los periodos preestablecidos y el sistema de pesos y contrapesos.

Así lo hizo en su momento la Corte Constitucional colombiana cuando se dio un caso similar en 2010.

Hoy comprobamos lo que ya sabíamos, si se nos hubiera consultado sobre la reelección indefinida nos hubiéramos opuesto mayoritariamente a esta. El pueblo no olvida fácilmente a los verdugos de la democracia.