Opinión
Columnas: “La Gloriosa” ya ha pasado al olvido
En este mes de mayo, con dos puentes vacacionales gozados por los enemigos del “camello”, a más del Día Universal de la “maldición bíblica” y de la gloriosa Batalla del Pichincha.
En este mes de mayo, con dos puentes vacacionales gozados por los enemigos del “camello”, a más del Día Universal de la “maldición bíblica” y de la gloriosa Batalla del Pichincha, a lo que se podría agregar la celebración del primer año del gobierno de Lenín sin “mesa servida” también debía celebrarse, el próximo lunes una fecha que indudablemente fue importante para nuestra historia. Se trata de la revolución del 28 de Mayo de 1944, bautizada con el nombre de “la gloriosa”, que un pueblo adolorido por el cercenamiento de su territorio tras el írrito Protocolo de Río de Janeiro de 1942 y el imperio de un gobierno represivo con los ya extinguidos “carabineros”, sacó del poder al entonces presidente Arroyo del Río y promovió en Carondelet el Segundo Velasquismo.
Sin embargo de la importancia histórica de esta fecha, que recuerda una justa sublevación popular en épocas en que se daban las postreras batallas de la Segunda Guerra Mundial (una semana después ocurriría el desembarco en Normandía que marcó el comienzo del fin del nazismo hitleriano), ahora son pocos los que se acuerdan de “la gloriosa”. Algo parecido a lo que sucede con la fecha que marca el triunfo del liberalismo en el país, 5 de Junio de 1895, con el Viejo Luchador (elegido como el “personaje del siglo XX”) que durante muchos años fue una fecha cívica y que ahora apenas sirve para que nostálgicos liberales, ahora ya casi desaparecidos (se habla más bien, aunque en forma peyorativa, de los “neoliberales”), lancen un: “Viva Alfaro, carajo”.
Una lástima que este tipo de “Alzheimer” se ha introducido en la memoria nacional para fechas tan importantes que, sin duda, dieron un gran impulso social y político al país... (FCV)