El cantón Milagro y la actual estación invernal

Ya se han agotado los colirios y las gotas para los ojos en el cantón Milagro debido a la epidemia creciente de “patada china” (conjuntivitis) que la mayoría de las veces se cura sola.

El problema es cuando se infecta con bacterias, se hinchan los párpados y hay secreciones amarillas y purulentas. Entonces ahí hay que recurrir al médico. También es la época de la influenza AH1N1, que en personas jóvenes y sanas puede ser pasajera, pero en los niños y personas de la tercera edad se puede complicar con neumonías y bronconeumonías que pueden llegar a ser fatales. Esas dos enfermedades se las puede prevenir con higiene, todo limpio, evitar las aglomeraciones, lavándose las manos con la mayor frecuencia. Y la influenza con vacuna. Yo me vacuné y no me ha dado.

Otro tema que ojalá no se repita son las inundaciones. El río Milagro está subiendo, y es un tema de nunca acabar. El año pasado en una de las tantas inundaciones perdí muebles, libros, plantas, etc. Deberían las universidades Agraria y Unemi, que son las principales de Milagro, plantear el tema y buscarle solución, pues afecta a toda la población de Milagro.

Nos contaba una respetable dama oftalmóloga que 3 personas que no son de aquí y vinieron por trabajo a nuestra ciudad utilizando cada uno de ellos lentes de contacto terminaron sufriendo de queratitis (infección del ojo), probablemente por la contaminación ambiental. Los tres tuvieron que usar lentes de armazón por 6 meses. La infección se curó cuando regresaron a su lugar de origen.

Además, las calles de Milagro deben ser reparadas con toda la premura posible.