Estoy seguro que la mayoría de las personas no conoce que las leyes más importantes, y que además son internacionales, son los 30 artículos de la Declaración Universal de los Derechos Humanos que deben ser incluidos en todas las Constituciones del mundo. Por tal motivo, los artículos de DD.HH. son irreducibles, irreversibles, imprescriptibles; por consiguiente todas las Constituciones deben contemplar estas disposiciones.

Asimismo, la Constitución se convierte en la primera ley que rige en nuestro país, la cual prevalece frente a otras leyes excepto lo establecido en los 30 artículos de los Derechos Humanos.

Es importante que todos conozcamos cuáles son nuestros deberes y derechos que constituyen las dos caras de una misma moneda. Solo las personas que se han formado en una cultura extraordinaria saben cuáles son sus atribuciones.

El Art. 1 del Código Civil define lo que es la ley indicando: “La ley es la declaración de la voluntad soberana que, manifestada en la forma prescrita por la Constitución manda, prohíbe y permite”.

La justicia depende de los valores de una sociedad y de las creencias individuales de cada persona. El concepto tiene su origen en el término latino justicia y permite denominar a la virtud cardinal que supone la inclinación a otorgar a cada uno aquello que le pertenece o le concierne.

Puede entenderse a la justicia como lo que debe hacerse de acuerdo a lo razonable, lo equitativo o lo indicado por el derecho.

Debemos insistir que el Derecho se inspira en postulados de justicia y constituye el orden normativo e institucional que regula la conducta humana en la sociedad y permite resolver conflictos en el seno de la misma.