Exclusivo
Opinión
Reflexiones sobre el Día del Trabajador
El 1 de mayo es reconocido en casi todos los países del mundo como el Día del Trabajo. Un homenaje hacia los mártires de Chicago, un grupo de sindicalistas anarquistas que fueron ejecutados en 1886. Aquellos trabajadores comenzaron una lucha por sus derechos; la jornada laboral de ocho horas fue uno de esos reclamos. Varios obreros iniciaron una huelga que afectó a algunas fábricas en los Estados Unidos, causando a su vez la muerte de varias personas.
Recordar esta fecha nos hace reflexionar sobre la importancia del trabajo para una sociedad. El trabajo, entendido como la capacidad de poner toda nuestra inteligencia, voluntad, esfuerzo y compromiso al servicio de una tarea, es lo que realmente dignifica a la persona. Trabajar nos permite ser protagonistas y no solamente espectadores, porque gracias a eso podemos transformar la realidad.
De manera particular, aplaudir a los responsables de las medianas y pequeñas empresas que generan empleo estable, ingresos justos y, sobre todo, sentido de autovaloración en sus miembros.
En el Ecuador, el mercado laboral, aún tiene muchos retos que superar para ofrecer mejores trabajos. La valoración del recurso humano es fundamental para mejorar el ambiente laboral.
Es importante que las empresas trabajen en estrategias que estén dirigidas al beneficio del negocio y a lograr un altísimo compromiso por parte de los empleados con los objetivos de la compañía.
Todo esto se puede lograr con la dirección de un buen líder. Una empresa sin un buen líder al frente, no podrá crecer. Como el capitán del barco es el más importante de toda la tripulación, el papel del líder es fundamental en toda organización.