SUSCRÍBETE
Diario Extra Ecuador

Creado:

Actualizado:

Parece ser que el millón es una especie de número cabalístico. Un exalcalde de Guayaquil hablaba con frecuencia de “un millón de amigos” como ahora en las campañas electorales se habla de impulsar un millón de empleos.

Ojalá que esta afirmación corresponda a la realidad porque la desocupación y el trabajo informal en el país tienen cifras que sobrepasan el 50 por ciento de la población económicamente activa.

Pero las promesas electorales suelen llevarse el viento, si los proponentes son elegidos. Y si no lo son, todo se hace agua de borrajas, “si te he visto, no me acuerdo”. Alguna vez tienen que hacerse realidad las promesas de aspirantes a un cargo público y, aunque modestas, deben decirse con realismo, olvidando las promesas faraónicas, pues aquí no hay faraones y todos somos barro mestizo con los méritos y limitaciones de nuestra realidad, de nuestra pobreza casi ancestral, solo excepcionalmente superada cuando algún gobierno ha dispuesto de trescientos mil millones de dólares, pero nos hemos quedado endeudados ante las once mil vírgenes.

Si se cumplieran tantas promesas electorales en nuestra nación, seríamos entonces una de las más importantes de América Latina.

tracking