Una tarea urgente: disminuir burocracia

En la sociedad democrática moderna se reconoce que los diferentes organismos del Estado requieren de personas que las hagan funcionar. Esto no está en discusión. Solo se cuestiona su número, la capacidad y el cabal cumplimiento de sus roles. Pero este es un aspecto que en el país, por la política y, sobre todo por los que acceden al poder, no lo han considerado necesario.

Siempre se pide que el monto del gasto corriente (que va en continuo ascenso) del Estado, disminuya. Pero los diferentes gobiernos lo siguen aumentando. Esto sucede porque quienes ganan las elecciones, de este y de los gobiernos seccionales, están acostumbrados al uso del clientelismo político. Por eso apenas acceden al poder lo primero que hacen es pagar a sus partidarios con cargos en dichas instituciones. De esta forma, los empleos públicos se incrementan por favores electorales.

Hoy se conoce que los empleados públicos aumentaron en 80% en la última década.

Pasaron de 280 mil a más de 500 mil. Esto incrementó los gastos del Presupuesto del Estado. Así, los montos de sus financiamientos son cada vez más difíciles. Por eso, recortar el número de burócratas es parte de la necesaria racionalidad y sensatez que deben tener los egresos fiscales y el gasto público.