Opinión
Editorial
Un partido decisivo
Hoy se juega uno de los partidos definitorios de la Copa Libertadores en la cual un equipo de provincia podría quedar campeón. Y va contra uno de los cuadros argentinos de mayor relevancia, el Boca Juniors, que tiene un historial ejemplar. Y, como lo manifiestan su entrenador y sus jugadores , a quienes no importa la historia, esperan ganar el partido como locales para entrar en la gran definición que se jugará en Buenos Aires, la tierra de Boca y el lugar de sus grandes hazañas.
Pero el Independiente del Valle que tiene su casa en Sangolquí, cerca de Quito, también cuenta en su trayectoria con hechos extraordinarios como haber vencido, en su calidad de visitante, a equipos con historia internacional hasta colocarse en la actual situación, sorprendente cuando es un equipo de corta existencia.
Jugadores, afición y dirección esperan una actuación de historia para culminarla en Buenos Aires, jugando en La Bombonera de Boca.
Sería una sorpresa gratísima si Independiente logra su sueño: coronarse campeón de La Libertadores, título que poquísimos equipos ecuatorianos han logrado.
“La Guayaquileñidad”
El próximo 25 de Julio Guayaquil conmemora 481 años de su fundación. Por eso se lo había bautizado como el Mes de la Guayaquileñidad, para demostrar de esta manera el amor, el respeto y la veneración que todos quienes vivimos en esta hermosa ciudad sentimos por ella.
La Municipalidad ha organizado, como todos los años, eventos de diversa naturaleza para llevar esparcimiento, distracción popular a todos los sectores sin distingo alguno. Con ocasión de esta efemérides hay que destacar con caracteres relevantes que Guayaquil es una ciudad pujante, emprendedora, llena de iniciativas que la colocan entre una de las principales urbes del continente. Guayaquil es próspera “por el esfuerzo de sus propios hijos”. Esto es evidente, nadie se atreve a discutir porque la razón no necesita fuerza.
Guayaquil es la cuna de todos los movimientos emancipadores y de defensa de las libertades que se han suscitado en el Ecuador, por mucho que algunos, por egoísmo, por envidia, y no por desconocimiento pretendan decir lo contrario.
El progreso de Guayaquil está a la vista de propios y extraños. La gestión municipal es un modelo en el cual deben mirarse todos quienes tienen a su cargo la gestión pública. Con una economía saneada, no hay dispersión de gastos en cosas fútiles. No hay exceso de burocracia, los organismos de crédito internacional le conceden préstamos porque saben bien a quién le otorgan. (BLC)