Editorial

La Agencia de Tránsito Municipal

El municipio de Guayaquil asumió la totalidad del servicio de tránsito y ha creado un ente que cumple su tarea, aunque aún sin la totalidad del servicio, que se concretará en poco tiempo más.

Los vigilantes del Tránsito cumplen su tarea a medida de sus posibilidades, esperando la incorporación de nuevas tecnologías de punta, tanto en el control como en la notificación de las infracciones.

En algunos casos, pocos felizmente, los vigilantes han sido agredidos verbal y hasta físicamente por algunos conductores irascibles, pero estas infracciones han recibido la condena de la ciudadanía que respaldan a los vigilantes. Sin embargo, no han faltado quejas por los partes emitidos por los vigilantes, algunos de los cuales no son la expresión de la verdad, y esta manera de alterar los hechos es una falta intolerable, pues eso implica una perversión moral y un abuso de sus funciones.

Al respecto, se han hecho públicas varias denuncias, cuyo resultado se desconoce; y es necesario que se inculque a los vigilantes el sentido estricto de su deber y que se sancione severamente a los que cometen el delito de la alteración de los partes de infracciones.